TÍTULO: JUSTIN BIEBER IBA A SER CASTRADO Y ASESINADO:La historia, de tan truculenta, nos trae a la memoria el cruel asesinato de John Lennon por un fan (Mark David Chapman, a quien había .
El macabro plan fue encargado por un recluso a dos hombres ya detenidos.
La historia, de tan truculenta, nos trae a la memoria el
cruel asesinato de John Lennon por un fan (Mark David Chapman, a quien
había firmado un autógrafo) que le disparó cinco tiros a bocajarro por
la espalda el 8 de diciembre de 1980. Son muchos los artistas
perseguidos por fanáticos descerebrados, entre ellos Justin Bieber. El
joven cantante canadiense ya estaba familiarizado con las amenzas de
muerte, vía Facebook o Twitter, pero que lo virtual pueda dar el salto a
la realidad se antoja harto impensable, aunque no imposible, como acaba
de confirmar la policía de Estados Unidos, que ha detenido a dos
hombres cuando perpetraban un grotesco plan para acabar con el ídolo de
adolescentes. Según informaciones del periódico 'The Sun', los
arrestados son Mark Staake y su sobrino Tanner Ruane. Ambos fueron
contratados por Dana Martin, peligroso reo que cumple una condena de 978
años de prisión por violar y matar a una niña de 15 años en el año
2000. Todo apunta a que Dana estaba obsesionado con el intérprete y que
había ideado un macabro plan que incluía el secuestro, la castración y,
finalmente, el asesinato de Bieber.
Da la casualidad de que los agentes encontraron en el
coche de Tanner Ruane unas tijeras de podar con las que, supuestamente,
iban a mutilar los genitales de la superestrella, que después debería
ser estrangulada con una corbata de estampado 'paysley' (especie de
lágrimas retorcidas), seña de identidad del asesino.
Fuentes policiales han informado de que Mark Staake
conoció a Dana Martin en la cárcel de Las Cruces, en Nuevo México, y que
su encargo no solo iba destinado a Bieber, sino a otras tres personas
más. Curiosamente, el complot se descubrió por las confesiones del
propio Dana a la policía, a quien alertaba de que se iba a producir el
crimen. Las razones por la que se delató aún se desconocen. El recluso
luce en una de sus piernas un tatuaje del cantante pop, de lo que se
deduce su obsesión por él.
Lo anunció la pareja a bombo y platillo en Twitter. Primero el padre, Carlos Moyá, con el mensaje: «12-12-12..q gran día para.(sigan ustedes).
Lo anunció la pareja a bombo y platillo en Twitter. Primero el padre, Carlos Moyá, con el mensaje: «12-12-12..q gran día para.(sigan ustedes)», que luego remataba con otro: «Estaba claro que el 12-12-12 no iba a ser un día más.». Y después la madre, Carolina Cerezuela, que se mostraba igualmente contenta por la fecha del nacimiento. Aunque también hay que decir que el hermanito de Carla, del que aún no han hecho público el nombre -aunque algunos rumores apuntan a que se llamará como su padre-, vino al mundo mediante cesárea. ¿Obligada o elegida? La jurado de 'Tu cara me suena' y el extenista mallorquín están de enhorabuena. El bebé, el primer varón del matrimonio, pesó 3,4 kilos y se encuentra perfectamente. Ayer, la mamá volvía a informar a sus fans tuiteros. «Tenemos a nuestro bebé en brazos. Muchísimas gracias a todos por vuestro cariño. Son las mejores Navidades de nuestras vidas...!!!», escribía la actriz, que dio a luz en la mallorquina clínica de Palmaplanas, del grupo hospitalario Quirón, la misma en la que nació la pequeña Carla.
TÍTULO: LA MONTAÑA ES MÁS DURA QUE LAS CARRERAS,,.
Vanesa Ortega Trancón (Plasencia, 1980) es una de esas deportistas perdida en el anonimato para la gran mayoría pero que está dando ...
Vanesa Ortega Trancón (Plasencia, 1980) es una de esas
deportistas perdida en el anonimato para la gran mayoría pero que está
dando mucho que hablar entre los suyos, los montañeros. Buena conocedora
de Los Andes, a donde ha viajado en seis ocasiones, e integrante de la
primera expedición femenina extremeña al Cho Oyu (8.201 m), la sexta
montaña más alta del mundo que se encuentra en el Himalaya, el minuto de
fama le ha llegado a Vanesa por casualidad.
La casualidad que el año pasado hizo que se suspendiera
una expedición a Los Andes bolivianos y que llevó a Vanesa a probar
suerte en su primera carrera de montaña en Jerte. La prueba salió tan
bien, que un año después Vanesa ya ha dejado atrás la Copa de
Extremadura, que ganó en su primera temporada, y se ha centrado en la
Copa de España hasta terminar la temporada en una magnífica tercera
posición en el kilómetro vertical Puig Campana de Alicante, última
prueba de la Copa del Mundo de la especialidad.
Por mencionar sólo alguna de las pruebas que ha ganado
Vanesa en los últimos 12 meses: la Transcanchos de Plasencia, la Crono
Asperillas de Casas de Castañar y los kilómetros verticales de
Calvitero, Castro Valnera, Uharte Arakil, Amboto, La Pineta y Peñalara.
En el Campeonato de España de Sierra Nevada sólo pudo ser sexta.
Con ese palmarés, en poco más de un año, Vanesa se ha
colado entre las mejores corredoras de España, que es lo mismo que decir
entre las mejores del mundo. «En España están las mejores», asegura
Vanesa. Un orgullo si cabe mayor porque la placentina lo ha conseguido
desde Extremadura. «Que se sepa que aquí también hacemos las cosas
bien», reivindica orgullosa.
Aunque no hay ninguna otra extremeña que participe en
kilómetros verticales fuera de nuestra región, sí que hay un grupo de
chicos que cada vez realiza mejores actuaciones fuera. Pedro José
Hernández, ganador de la Copa de Extremadura 2012, por ejemplo,
participó en el de Amboto, uno de los de mayor nivel, y terminó
decimotercero.
Vanesa no vive de la montaña. Estudia último año de
enfermería en Plasencia, aunque vive el Aldeanueva de la Vera, y ahora
está haciendo prácticas en Navalmoral de la Mata. Pero en la montaña se
encuentra en su medio. Esa fácil adaptación a las alturas y a los
grandes esfuerzos que supone intentar un ochomil le dan una ventaja que
está sabiendo aprovechar. «La montaña es más dura que las carreras, son
dimensiones muy distintas». En un kilómetro vertical se ascienden mil
metros corriendo entre cuatro o cinco kilómetros y después vuelves a
casa. En Los Andes o en el Himalaya el esfuerzo es continuo y duras
semanas. Además, Vanesa es de las pocas corredoras que prefiere el frío
al calor. «Corro mejor con frío». Y lo demostró en Peñalara. En la
sierra madrileña, la extremeña se impuso con autoridad en una prueba que
se corrió a cinco grados bajo cero y una sensación térmica de menos
diez.
Buen ambiente
Ni montañismo ni atletismo. «Las carreras de montaña no
tienen nada que ver con el atletismo, yo misma nunca he sido atleta.
Aunque sí tienen conexión y muchos atletas se han pasado a las carreras
de montaña». Para Vanesa, la principal diferencia entre atletismo y
carreras de montaña está en el ambiente. «Entre nosotros hay muy buen
ambiente, no como en el atletismo que tiene un carácter más
competitivo». La montaña es siempre solidaria.
Vanesa no renuncia a la gran montaña, de hecho, las
carreras son una ayuda en su preparación. «Viene muy bien porque son dos
entrenamientos complementarios». Aunque en sus objetivos para la
próxima temporada destaca seguir creciendo en las carreras de montaña.
El calendario extremeño queda en un segundo plano. «Me gustaría correr
la Copa de Extremadura, pero es muy difícil porque las fechas coinciden
con pruebas fuera». Y la Copa de España pasa a ser la primera prioridad.
«Este año he sido segunda, tardé mucho en conseguir la forma, si
hubiera tenido alguna prueba más...», se lamenta Vanesa.
La Copa de España de Carrera Vertical 2012 ha tenido tres
pruebas. En Sabiñánigo (Huesca), Vanesa terminó tercera; en Barruera
(Lleida), fue decimosegunda y en Brañosera (Palencia), ganó. En la
clasificación general sólo la catalana Mónica Ardid sumó mejores
resultados que ella.
Después de la Copa de España, toca pensar en el calendario
internacional. Este año, Vanesa ha participado en la prueba española de
la Copa del Mundo, el kilómetro vertical Puig Campana en Alicante,
terminó tercera. La próxima temporada la Copa del Mundo volverá a tener
una prueba en España y a Vanesa le gustaría participar en alguna otra,
pero la realidad económica choca con sus deseos. «Ya me cuesta mucho
dinero ir a las carreras de España....». Sin patrocinadores ni ayudas,
la aventura de Vanesa es un reto que se sostiene con sus medios y sobre
todo con su ilusión.
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