Cincuenta y cinco parpadeos en 22 segundos son muchos, ¿no?-foto- Alfredo Pérez Rubalcaba tenía memorizado el discurso, pero le delataron los ...
Cincuenta y cinco parpadeos en 22 segundos son muchos,
¿no? Alfredo Pérez Rubalcaba tenía memorizado el discurso, pero le
delataron los ojos. Mariano Rajoy llevaba notas... y la vitola de
ganador. El entonces candidato del PP fue el primero en presentarse en
el Palacio Municipal de Congresos de Madrid el pasado 7 de noviembre de
2011. A las 21.02 horas, un minuto antes de lo acordado. Pie derecho
sobre la acera, sonrisa a la prensa: 'Estoy bien'. Templado... ¿o no
tanto? Porque hubo un refriegue de manos, un intento de coger el borde
de la manga derecha de la camisa y de meter la mano en el bolsillo de la
americana. Rubalcaba tampoco sabía muy bien qué hacer con las manos e
hizo el amago ¡siete veces! de dejarla a buen recaudo en el bolsillo.
Éste es solo el primer capítulo del anecdotario que
recoge el libro 'Debate del debate 2011 España', que ha publicado la
Academia de las Ciencias y las Artes de la Televisión, cuyo presidente,
Manuel Campo Vidal, ejerció de moderador entre los dos principales
candidatos a las últimas elecciones generales, celebradas el 20 de
noviembre del año pasado, con victoria del PP.
Hasta ahora sabíamos que la contienda televisiva tuvo una
audiencia de 12.005.000 espectadores y un 54,2% de 'share', el
equivalente a llenar el Santiago Bernabeu o el Nou Camp 140 veces. Fue
el segundo debate más visto tras el de Zapatero y Rajoy en 2008 (13
millones, 61,7%).
El precedente de todo esto fue el 'tú a tú' radiofónico
entre Manuel Fraga (PP) y Fernando Morán (PSOE) en 1987, pero algunos,
como Jordi Pujol, no se prestaron jamás. En EE UU, George Bush (padre)
tampoco era partidario pero no le quedó más remedio ante el acoso del
equipo de campaña de Bill Clinton, que le enviaba a un hombre disfrazado
de pollo, símbolo de la cobardía.
Aznar, un minuto más
Aquí no hubo que recurrir a eso, pero sí llegar a pactos.
Hasta un día antes los contendientes no decidieron si estarían de pie o
sentados, así que se prepararon dos iluminaciones distintas (se usaron
18 cámaras de realización) y un decorador visitó las casas de Rajoy y
Rubalcaba para asegurarse de que la silla tenía la altura adecuada. Se
acordaron 100 minutos, 12 de publicidad y 14 turnos de palabra. Cada
intervención, en torno a tres minutos, aunque Rubalcaba midió mal: en
una le sobraron 7 segundos (en el debate entre González y Aznar en 1993,
el candidato popular habló un minuto más).
Calculan los expertos que el debate no decanta más del 2%
de los indecisos, pero por si acaso... Las palabras que más repitió
Rubalcaba fueron 'programa' y 'sanidad' y Rajoy insistió con 'empleo' y
'España'. Veinte cadenas emitieron el debate, se acreditaron 650
periodistas de 80 medios y hubo 250 invitados en el plató. 300.000
personas lo siguieron por internet desde 150 países: 1.800 desde
Londres, 1.500 desde Ciudad de México, 14 desde Filipinas, 10 desde
Líbano, 8 desde Jamaica. ¡Y hasta desde Namibia!.
El debate multiplicó por 50 el tráfico de Twitter y se
registraron 180.000 tuits por hora. Rajoy publicó una foto suya
ultimando el discurso frente a un plato de jamón. Y no se le atragantó.
TÍTULO: LA PANTOJA Y TELECINCO DEL AMOR AL ODIO,.
Un año después de dar las campanadas la tonadillera reclama 5 millones de euros a la cadena por emitir 'Mi Gitana'. Ya están otra vez en ...
Isabel Pantoja y Telecinco... del amor al odio
La actriz Eva Marciel caracterizada como Isabel Pantoja en 'Mi gitana' [Foto: Elvira Megías]
Un año después de dar las campanadas la tonadillera reclama 5 millones de euros a la cadena por emitir 'Mi Gitana'. Ya están otra vez en guerra
La de Isabel Pantoja y Telecinco nunca ha sido una relación sencilla, pero desde los tiempos de 'Aquí hay tomate' la cosa no se había puesto tan fea. En 2011, la tonadillera comió las uvas con Jorge Javier Vázquez,
escenificando así una paz que venía 'bendecida' con un contrato de
muchos ceros con la cadena de Fuencarral. No se ha cumplido un año de la
feliz estampa y el idilio se ha tornado enfrentamiento. La artista reclama a Telecinco 5 millones de euros por la emisión de la serie 'Mi gitana',
una tv-movie que se incluyó en la parrilla de marzo y que recrea la
vida de la cantante, haciendo especial hincapié en su amistad con la
locutora Encarna Sánchez.
Para la folclórica, esta ficción de tres capítulos -fue un éxito de audiencia con una media de 3.590.000 espectadores y un 19% de 'share'-, solo muestra «injurias y calumnias» sobre su vida privada y personal. Pantoja denuncia, además, que se han incluido escenas que no se corresponden con la realidad. La demanda fue admitida a trámite en octubre y los abogados de la viuda de Paquirri están convencidos de que ganará, de ahí la abultada cifra que piden.
Después de mucho tiempo de uñas, el 17 de junio de 2011 Isabel Pantoja iniciaba un acercamiento con Telecinco, cuando acudió al plató de 'Supervivientes' para recibir a su hijo, Kiko Rivera, a la salida del 'reality'. Del odio al amor en dos días. La artista firmó un contrato de casi 2 millones de euros por varias galas -una, la Nochebuena pasada-, por desfilar por los platós de la cadena -se libró de 'Sálvame'- y por sustituir a Belén Esteban el 31 de diciembre en la Puerta del Sol. La cantante retiró las demandas interpuestas en el pasado a Telecinco y, casualidad, la cadena dejaba en el cajón esta polémica serie.
Pero en febrero pasado la cosa se torció, cuando la Pantoja concedió una polémica entrevista telefónica a 'Espejo Público' (Antena 3), algo que puso en peligro el acuerdo. Después del 'desliz', Telecinco emitió 'Mi gitana' y, poco a poco, la relación se fue enfriando hasta que madre e hijo -Kiko colaboraba en el programa 'Tú sí que vales'- se marcharon por la puerta trasera rompiendo todos los contratos. La puntilla la pone ahora Isabel Pantoja con esta demanda millonaria que reinicia la guerra... Otra vez.
Para la folclórica, esta ficción de tres capítulos -fue un éxito de audiencia con una media de 3.590.000 espectadores y un 19% de 'share'-, solo muestra «injurias y calumnias» sobre su vida privada y personal. Pantoja denuncia, además, que se han incluido escenas que no se corresponden con la realidad. La demanda fue admitida a trámite en octubre y los abogados de la viuda de Paquirri están convencidos de que ganará, de ahí la abultada cifra que piden.
Después de mucho tiempo de uñas, el 17 de junio de 2011 Isabel Pantoja iniciaba un acercamiento con Telecinco, cuando acudió al plató de 'Supervivientes' para recibir a su hijo, Kiko Rivera, a la salida del 'reality'. Del odio al amor en dos días. La artista firmó un contrato de casi 2 millones de euros por varias galas -una, la Nochebuena pasada-, por desfilar por los platós de la cadena -se libró de 'Sálvame'- y por sustituir a Belén Esteban el 31 de diciembre en la Puerta del Sol. La cantante retiró las demandas interpuestas en el pasado a Telecinco y, casualidad, la cadena dejaba en el cajón esta polémica serie.
Pero en febrero pasado la cosa se torció, cuando la Pantoja concedió una polémica entrevista telefónica a 'Espejo Público' (Antena 3), algo que puso en peligro el acuerdo. Después del 'desliz', Telecinco emitió 'Mi gitana' y, poco a poco, la relación se fue enfriando hasta que madre e hijo -Kiko colaboraba en el programa 'Tú sí que vales'- se marcharon por la puerta trasera rompiendo todos los contratos. La puntilla la pone ahora Isabel Pantoja con esta demanda millonaria que reinicia la guerra... Otra vez.
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