Destacada actuación de las corredoras extremeñas -cuarta y quinta- en la San Silvestre Vallecana,.
Teresa Urbina y Cristina no fueron a Madrid en el último
día del año a dar un paseo. Las corredoras extremeñas fueron a competir
al máximo y se trajeron unos destacados cuarto y quinto puesto en
féminas dentro de un plantel de lujo que contaba con nombres propios tan
conocidos como la campeona Marta Domínguez, que acabó a escasos
segundos de las extremeñas.
Urbina fue la mejor, entrando en cuarta posición con un
tiempo de 33:46. Jordán le siguió, empatada con el mismo crono con
Silvestre (33:53) y a seis segundo entró Domínguez. Se impuso la
triatleta Ana Burgos con 35:05, seguida de Recuerdo Arroyo (35:30) y de
la china Dong Liu (36:31).
Linet Masai tiró al principio pero en el quinto kilómetro
no pudo seguir el ritmo de Gelete Burka, que deseaba sacarse la espina
del 2011, cuando perdió el esprint con su compatriota Tirunesh Dibaba.
Masai, medallista de bronce en 10.000 metros en los últimos Mundiales,
cedía diez segundos en el km. 5 con respecto a Burka, mientras Diana
Martín era la primera española, 50 segundos por detrás. Más retrasadas
marchaban Marta Domínguez y la portuguesa Jessica Augusto, vencedora en
2010.
«Muy contenta con mi debut en la San Silvestre Vallecana,
marca personal y muy buenas sensaciones. La mejor manera de despedir el
año», aseguraba Cristina Jordán en twitter. Domínguez, tres veces
ganadora de la carrera (la última, en 2008), había advertido, la
víspera, que sólo si las africanas se lesionaban tendría alguna opción
de obtener un cuarto triunfo. La hipótesis no cuajó, y por lo tanto la
palentina hubo de conformarse con el quinto puesto, uno por detrás del
año pasado.
Doblete etíope
Tariku Bekele y Gelete Burka repitieron doblete etíope en
la San Silvestre Vallecana, cuya 48 edición congregó en las calles de
Madrid a 40.000 corredores, incluidas 11.000 mujeres, para cubrir 10
kilómetros entre los estadios del Real Madrid y del Rayo Vallecano. Un
año después de ganar la San Silvestre de Sao Paulo (Brasil), el hermano
pequeño de Kenenisa Bekele ha dominado la carrera vallecana y se ha
convertido en el tercer hombre que gana las dos grandes San Silvestres
mundiales, siguiendo los pasos del portugués Carlos Lopes (ganador aquí
en 1979 y 1980) y el mexicano Arturo Barrios (1989).
Para formar parte de una masa espectacular de silvestres
vallecanos, 40.000 corredores desafiaron el frío (3 grados) y la amenaza
de un regreso incierto a la última cena del año por culpa de la huelga
de metro. No hubo fase de tanteo. Bekele salió tirando y en el segundo
kilómetro sólo le seguían Ayad Lamdassem, Alberto Lozano, Roberto Alaiz y
Manuel Penas. Mediada la prueba, el etíope se quedaba a solas con
Lamdassem, un hombre que, según confesaba la víspera, suele pasarlo mal
en la última fase. Sucedió lo que Ayad temía. A dos kilómetros de la
llegada Bekele cambió bruscamente y dejó atrás al español, que hubo de
resignare a ser, por tercera vez, tercero. Venció Tariku con un tiempo
de 28:29, 16 segundos por delante de Lamdassem. Roberto Alaiz (29:08)
completó el podio.
Chema Martínez, el último ganador español de la San
Silvestre Vallecana, regresó a la cita con 41 años. El madrileño, cuarto
el año pasado, dijo que ahora estaba en mejor forma que entonces, pero
terminó octavo.
TÍTULO: NÚMEROS 1 OTRA VEZ,.
En el plano colectivo, algunos de los mejores conjuntos lograron alimentar su legado con más éxitos. La selección estadounidense de ..
Djokovic, Vettel, Loeb y Bolt conservaron su reinado en 2012,.
Un año de Juegos Olímpicos suele significar el punto
inicial de nuevos ciclos y nuevas estrellas en el deporte. Sin embargo,
en 2012 algunos de los deportistas más sobresalientes lograron mantener
su primer puesto como reyes de sus especialidades frente a la presión de
los aspirantes.
Para empezar, el mundo del motor estuvo dominado por los
'sebastianes'. Por un lado, Sebastian Vettel se proclamó el piloto más
joven en sumar su tercer campeonato de la Fórmula 1. Por el otro,
Sébastien Loeb añadió su noveno cetro consecutivo en el mundial de
rallies para elevarse a la categoría de mito.
En la F-1 el alemán debió exigirse al máximo en una
campaña en la que el español Fernando Alonso tuteó a los Ferrari gracias
a su regularidad. Sin embargo, el esfuerzo final de los Red Bull
permitió al germano una remontada que finalizó en un final de campeonato
igualado y emocionante que se decidió en el GP de Brasil. El rey alemán
pudo repetir su gesto de número 1 con más satisfacción que nunca. «¿El
próximo desafío? En primer lugar quiero aprovechar todo, pues lo más
importante es estar presente y para eso no puedo emocionarme demasiado
para los próximos años», señaló al garantizarse un nuevo año más de
reinado.
En el ámbito de los rallies el soberano absoluto es
Sébastien Loeb. Desde 2004 el alsaciano ha aumentado su palmarés hasta
los nueve mundiales (todos consecutivos) con 76 pruebas ganadas. Lejos
de sentirse amenazado, Loeb se impuso su tiranía en nueve pruebas de
2012 para acabar en lo más alto sin aparente esfuerzo.
El francés se despidió 'de facto de' la competición
cuando avisó de que en 2013 reducirá su participación a solo cuatro
rallies (Montecarlo, Suecia, Argentina y Francia). Su retirada
sorprendió a sus rivales pero no a sus allegados. «Creo que ya en 2005
le dije a mi madre que quería parar pronto. Pero han pasado unos pocos
años en los que ñmi copilotoí Daniel ñElenaí me decía 'Vamos a seguir
adelante hasta 2012' y yo siempre pensé ¿Está loco? Pero al final
estuvimos hasta 2012», reconoció el conductor en Sport Auto.
Djokovic, en racha
Por su parte, el serbio Novak Djokovic finalizó la
temporada 2012 también como número uno del tenis mundial de la
clasificación de la ATP, sumó un nuevo Grand Slam y el torneo de
maestros por delante de sus rivales de siempre. Aunque Roger Federer le
arrebató el primer puesto del ránking mundial durante algunas semanas el
balcánico respondió con otra campaña como la raqueta más destacada.
El belgradense, de 25 años, ganó seis títulos: el Abierto
de Australia -por tercera vez en su carrera-, los de Másters 1000 de
Miami, Toronto y Shanghái, así como el torneo de Pekín, y el 'Masters'
anual disputado en Londres, prueba que no conquistaba desde la edición
2008. Así, la ITF (Federación Internacional de Tenis) lo designó mejor
jugador del año.
Usain Bolt, la leyenda
En los Juegos Olímpicos los aspirantes a reafirmar sus
puestos entre los mejores de la historia eran Usain Bolt, Michael Phelps
y Yelena Isinbayeba. La pertiguista no logró sumar su tercer oro
olímpico consecutivo porque se colgó un bronce en Londres y se quedó con
la espina clavada. «He decidido ir a los Juegos de Río 2016 para tener
mi medalla de oro de vuelta. Voy a competir en los campeonatos del mundo
en Moscú en 2013 y después tendré un descanso, no sé de cuánto tiempo,
para volver a ir a Río de Janeiro», reconoció después la rusa
destronada.
En cambio, Phelps sí logró inscribir su nombre entre los
mejores del mundo con su récord de 22 medallas olímpicas. Aunque en
Londres se alejó de su marca de siete oros de Pekín con cuatro preseas
doradas (dos en pruebas por equipos) su retirada dejó huérfano al
deporte olímpico y a él mismo. «Es un poco raro, es muy extraño, el
primer día que no tienes que nadar y nunca tendrás que volver a hacerlo.
No estoy seguro de cómo me siento ahora. Es muy confuso», confesó el
estadounidense un día después de su último podio.
No obstante, la imagen de los Juegos Olímpicos se fijó
con Usain Bolt. El jamaicano había sido nombrado atleta del año según la
Federación Internacional de Atletismo en 2011 a pesar de que en los
campeonatos del mundo de Daegu fue descalificado por una salida falsa en
la prueba de 100 metros. En Londres se deshizo de cualquier duda sobre
su capacidades: tres oros (100 metros, 200 metros y 4x100). «Ahora estoy
en la misma categoría que Michael Johnson, soy leyenda», proclamó el
rey de los Juegos. Otra vez fue número 1.
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