Nicole Kelly nació sin el antebrazo izquierdo, pero desde
el jardín de infancia se acostumbró a hacer lo mismo que sus compañeros
o, al menos, a intentarlo. «El béisbol, el baile, el buceo, no hay nada
que yo no pruebe», explica la joven de 23 años. Lo que nunca se le había
pasado por la cabeza era presentarse a un concurso de belleza, pero
hace unos meses se animó, al considerar que podía ser un buen podio
desde el que dar voz a las personas con discapacidad. En febrero se alzó
con el triunfo en su condado y, el pasado fin de semana, fue elegida
Miss Iowa: «Si los jueces ven que sabes hablar y que eres apasionada,
eso te da ventaja», ha explicado. Curiosamente, es la segunda vez que
una mujer con una sola mano gana este certamen: en 2000, Iowa coronó a
Theresa Uchytil, a quien también le faltaba el antebrazo izquierdo.
Para Nicole, ser el objeto de las miradas no es nada nuevo.
«Cuando la gente quiere saber qué le pasó a mi brazo, les pregunto qué
piensan que pudo ser. Hasta la fecha, mi explicación favorita es que me
lo mordió un tiburón. ¡Es perfecto para alguien de Iowa!», se ríe, desde
un estado que tiene el mar a más de mil kilómetros. Al final, Nicole
encontró su vocación en el teatro y ha estudiado dirección y producción
en la Universidad de Nebraska. Ella misma recalca la ironía: «El
escenario es un mundo en el que doy permiso a todos para que me miren
fijamente».
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