TÍTULO; La ola de calor alcanza su punto máximo.
Ayer se registraron temperaturas de hasta 44º en puntos de Córdoba y Jaén.
La situación se mantendrá mañana en todo el país y se prolongará hasta el viernes en el este.
La ola de calor que azota a España desde el domingo alcanza su punto álgido. Hoy será el día más caluroso de una semana en la que, según prevé la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), pueden registrarse temperaturas que superen récords históricos en algún observatorio. Ayer, las máximas del país las marcaron las localidades de Montoro (Córdoba) y Andújar (Jaén), que alcanzaron los 44,4º. En el aeropuerto de Córdoba el mercurio subió hasta los 44,1º y en Mérida (Badajoz) y Santa Elena (Jaén) se registraron 43,1º. Además, Madrid ha vivido el día y la noche más calurosos de junio desde 1920 y ha alcanzado una máxima de 39,1º.
Catorce comunidades autónomas continúan hoy en alerta amarilla (riesgo) o naranja (riesgo importante) por temperaturas máximas. En Andalucía hay aviso naranja en las provincias de Córdoba y Jaén, con previsiones de hasta 40º en algunos puntos, y amarillo en el resto.Aragón está en alerta naranja por temperaturas máximas en la ribera del Ebro (Zaragoza), y en alerta amarilla en Huesca y Teruel. En la comunidad de Madrid hay alerta también naranja por temperaturas que llegarán a los 39º en el sur y 38º en el área metropolitana y Henares.
Todas las provincias de Castilla-La Mancha mantienen la alerta por altas temperaturas, destacando Ciudad Real, con aviso naranja por máximas de 40º en el valle del Guadiana, y Toledo con temperaturas de 39º en el valle del Tajo, mientras que en La Rioja hay alerta naranja por máximas de 39º en la ribera del Ebro.
En las Canarias hay alerta naranja en Fuerteventura y Gran Canarias y amarilla en el resto de las islas. Cantabria, Castilla y León, Cataluña, Navarra, Comunidad Valenciana, Extremadura, País Vasco y Murcia mantienen la alerta amarilla por calor.
Las altas temperaturas se mantendrán mañana en todo el país y se prolongarán hasta el viernes en el tercio este peninsular.
TÍTULO: Detenidos en Melilla dos islamistas 'tan peligrosos como los de Leganés del 11-M'.
- Son dos españoles de 25 y 30 años dedicados a labores de reclutamiento.
- Se les atribuye la tortura y el asesinato de dos ex compañeros de grupo.
- Las detenciones se han producido en el barrio melillense de la Cañada Real.
TERRORISMO | Había una orden de detención internacional
Detenidos en Melilla dos islamistas 'tan peligrosos como los de Leganés del 11-M'
- Son dos españoles de 25 y 30 años dedicados a labores de reclutamiento
- Se les atribuye la tortura y el asesinato de dos ex compañeros de grupo
- Las detenciones se han producido en el barrio melillense de la Cañada Real
La Policía sigue detectando un fuerte aumento del radicalismo islamista en España. Ha localizado focos geográficos donde la implantación de los radicales es potente. Y uno de estos focos se encuentra en Melilla, donde ha detenido en las últimas horas a dos integrantes de una célula radical islamista.
Según los datos oficiales aportados por el Ministerio del Interior, se trata de dos ciudadanos españoles de 25 y 30 años que presuntamente lideraban un grupo con conexiones internacionales para la formación en campos de entrenamiento o zonas de conflicto bélico y dedicado a reclutar jóvenes. Ambos detenidos son considerados autores de la tortura y asesinato de dos integrantes del grupo que decidieron abandonar el mismo y desvincularse de la fuerte ortodoxia religiosa impuesta.
Según Interior, las investigaciones de la Comisaría General de Información contra el terrorismo de origen radical islamista, han permitido el arresto de Rachid Abdellah Mohamed y de Nabil Mohamed Chaib en el barrio melillense de la Cañada Real. Ambos estaban a la cabeza de un grupo compuesto en su mayoría por ciudadanos españoles de origen magrebí asentados en Melilla o marroquíes residentes en Farhana (Marruecos).
El 15 de julio 2008 se hallaron en Nador (Marruecos) los cuerpos de dos componentes de este grupo, que habían sido torturados y asesinados en aplicación de un castigo proveniente de una radical interpretación de la Sharia o ley islámica. Las víctimas habían adoptado comportamientos occidentales o "infieles" y decidieron desvincularse de las actividades del grupo.
Tras laboriosas indagaciones, los agentes llegaron a determinar la autoría de los asesinatos en las personas de Rachid Abdellah Mohamed y Nabil Mohamed Chaib, quienes han permanecido desde 2008 huidos en distintos países de Europa, y sobre los que, asimismo pesa una orden internacional de detención emitida por las autoridades marroquíes.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, explicó en los pasillos del Congreso de los Diputados que los dos detenidos son personas capaces de cometer atentados de una especial brutalidad y que están sometidos a una especialísima y radical ortodoxia doctrinal, similar, análoga y la misma que tenían los que se inmolaron en Leganés en 2004. Fernández Díaz detalló que la Policía ha podido capturarlos después de un largo periodo de tiempo fugados por varios países europeos.
Según los datos oficiales aportados por el Ministerio del Interior, se trata de dos ciudadanos españoles de 25 y 30 años que presuntamente lideraban un grupo con conexiones internacionales para la formación en campos de entrenamiento o zonas de conflicto bélico y dedicado a reclutar jóvenes. Ambos detenidos son considerados autores de la tortura y asesinato de dos integrantes del grupo que decidieron abandonar el mismo y desvincularse de la fuerte ortodoxia religiosa impuesta.
Según Interior, las investigaciones de la Comisaría General de Información contra el terrorismo de origen radical islamista, han permitido el arresto de Rachid Abdellah Mohamed y de Nabil Mohamed Chaib en el barrio melillense de la Cañada Real. Ambos estaban a la cabeza de un grupo compuesto en su mayoría por ciudadanos españoles de origen magrebí asentados en Melilla o marroquíes residentes en Farhana (Marruecos).
Sumisión y hermetismo
Este grupo se caracterizaba por su marcado hermetismo y por la adopción de fuertes medidas de seguridad internas, tendentes a ocultar su existencia. Sus integrantes eran obligados a llevar una vida de sumisión a las creencias takfiríes (una de las ramas más ortodoxas del yihadismo o radicalismo islamista) que incluía separarse de sus familias, abandonar también los estudios o la prohibición de escuchar música o ver la televisión. Uno de los referentes religiosos del grupo es Abu Qutada, quien en su adoctrinamiento hacia la Yihad (Guerra Santa), destacaba como ejemplos inspiradores hechos como el acaecido en la localidad madrileña de Leganés el 3 de abril de 2004, tras el brutal atentado del 11-M.El 15 de julio 2008 se hallaron en Nador (Marruecos) los cuerpos de dos componentes de este grupo, que habían sido torturados y asesinados en aplicación de un castigo proveniente de una radical interpretación de la Sharia o ley islámica. Las víctimas habían adoptado comportamientos occidentales o "infieles" y decidieron desvincularse de las actividades del grupo.
Tras laboriosas indagaciones, los agentes llegaron a determinar la autoría de los asesinatos en las personas de Rachid Abdellah Mohamed y Nabil Mohamed Chaib, quienes han permanecido desde 2008 huidos en distintos países de Europa, y sobre los que, asimismo pesa una orden internacional de detención emitida por las autoridades marroquíes.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, explicó en los pasillos del Congreso de los Diputados que los dos detenidos son personas capaces de cometer atentados de una especial brutalidad y que están sometidos a una especialísima y radical ortodoxia doctrinal, similar, análoga y la misma que tenían los que se inmolaron en Leganés en 2004. Fernández Díaz detalló que la Policía ha podido capturarlos después de un largo periodo de tiempo fugados por varios países europeos.
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