martes, 2 de octubre de 2012

ARTHUR ACHS SULZBERGER:Leyenda del despistado Sulzberger ./ LA PANTERA ROSA./ ASESINOS SIN ROSTRO.

TÍTULO: ARTHUR ACHS SULZBERGER:

Leyenda del despistado Sulzberger .

Anxel Vence.

ANXEL VENCE Cuentan las necrológicas de estos días una muy curiosa anécdota del recién fallecido editor del New York Times, Arthur Ochs Sulzberger, que acaso ilustre la compatibilidad entre un despistado periodista y un extraordinario defensor de la libertad de prensa.

Enviado por su familia a París con el propósito de que se foguease en esa corresponsalía europea, el entonces joven heredero "Punch" Sulzberger aprovechó un fin de semana libre para asistir a las 24 horas de Le Mans. Quiso la mala suerte que un bólido extraviado de la pista cayese sobre la tribuna, donde dejó un rastro de más de ochenta cadáveres. A diferencia de lo que suele verse en las películas norteamericanas, Sulzberger no salió de estampida en busca del teléfono más próximo y, de hecho, no llegó a escribir una sola línea sobre el asunto para su periódico. "No hizo nada para desmentir su reputación de amable nulidad", diría años más tarde Edwin Diamond en su libro "Behind The Times".

Diez años después de ese singular incidente, Sulzberger asumió -"por descarte", según las malas lenguas- el cargo de editor en jefe del periódico al que había privado de una noticia de tanto calibre. Contra todo pronóstico, aquella "amable nulidad" desde el punto de vista estrictamente periodístico no tardaría en convertirse en carne de leyenda y referencia para todos los profesionales de este oficio que García Márquez describió como "el mejor" -y el peor pagado- de todos los posibles.

Entre sus muchos méritos figura el de haber salvado de la quiebra al New York Times durante la crisis que pobló sus balances de números rojos en la década de los setenta. La "vieja dama gris" -tal como se conocía al periódico por su seriedad y el tono ala de mosca de sus columnas- estuvo entonces al borde del naufragio. Sulzberger logró darle color al difunto mediante varias capas de suplementos algo más livianos de contenido que no tardaron en suscitar el interés del público y, en consecuencia, el de los inversores dispuestos a reforzar la base financiera del Times sin miedo a perecer en el intento.

Más notable aún que eso sería el tenaz enfrentamiento de Sulzberger con el poder, que le llevó a publicar los Papeles del Pentágono a riesgo de acabar en la cárcel, como le advirtieron los propios miembros de su consejo editorial. Gran admirador de Thomas Jefferson, aquel presidente levemente anarquista que prefería "periódicos sin Gobierno a Gobierno sin periódicos", el legendario editor del Times libró batallas a favor del periodismo en libertad contra adversarios tan poderosos como Johnson o Kennedy. Y las ganó, aunque -paradójicamente- no siempre estuviese de acuerdo con la línea editorial de su propio periódico, que veía demasiado escorada a la izquierda.

El Times tiene hoy nuevos y a veces atípicos accionistas, pero la herencia de Sulzberger sigue viva en una línea editorial basada en la desconfianza del poder, cualquiera que éste sea. Cierto es que de vez en cuando se le va la mano con algún reportaje como el que días atrás describía a España en términos exageradamente africanos de "austeridad y hambre". Son excepciones, claro está. Como la de aquel joven Sulzberger que, en su día libre, no encontró noticiosa la muerte de ochenta y tantas personas en el circuito de Le Mans. Hasta las leyendas del periodismo se toman a veces vacaciones de lo suyo.


TÍTULO: LA PANTERA ROSA./ ASESINOS SIN ROSTRO.




TÍTULO:LA PANTERA ROSA.
 
Es un dibujo animado que hace muchas travesuras graciosas.Los niños se rien mucho.Pero siempre en cualquier problema sale ganado.Es de color rosa.Lo daban en la televisión.Tambíen salia otro compañero que le ponia las trapas a la pantera rosa.Foto de la pantera rosa y de sus compañeros. FIN.



TÍTULO: ASESINOS SIN ROSTRO.
 
Asesinos sin rostro es una historia bastante rara de resolver para la polícia o los detectives. Son asesinatos cometidos en la ciudad de Londres, pero sin dejar huella para averiguarlos.La familia de los muertos no compreden a la polícia en como no pueden saber nada de los asesinatos sin rostro.Foto del título.FIN.

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