Son como Los Panchos del glam. No se retiran jamás. Y si se van, vuelven. Manuel Arjona fundó LocoMia hace treinta años y, 2,5 millones de .
Son como Los Panchos del 'glam'. No se retiran jamás. Y si
se van, vuelven. Manuel Arjona fundó LocoMia hace treinta años y, 2,5
millones de discos vendidos después, la ha resucitado con tres nuevos
integrantes. A sus 46 tacos, este barcelonés de hablar pausado sigue
meneando el abanico.
-«Lucha, fuerza, valor...». Muy castigador le veo en su nuevo disco, 'Imperium'.
-No tengo la voz tan grave pero tuve que forzarla un poquito.
-Y vestido de Napoleón, pero en cuero.
-Sí. La verdad es que si él levantara la cabeza le daba algo.
-¿Cuánto llegaron a medir sus hombreras?
-Creo que 70 centímetros de hombro a hombro. Por algunas puertas casi teníamos que pasar de canto.
-No aparenta sus 46 años. ¿Mucho botox?
-Ácido hialurónico, que hidrata mucho la piel, y algún
pequeño retoque. Pero también son los genes. Mi madre tiene ya 90 años y
se mantiene estupenda.
-¿Tiene pareja?
-Qué va. No estoy casado ni tengo pareja. Mi trabajo me ha absorbido. Con tanto ajetreo no es fácil cuajar una relación.
-¿Y qué fue de sus compañeros? ¿Se los comió la noche?
-Gracias a Dios, a ninguno se lo ha comido la noche. Se
dedican a otras cosas. Carlos es encargado en una boutique de ropa en
Tenerife. Juan Antonio, el rubito, dirige un restaurante en Barcelona. Y
Francesc se dedica a escribir novela y poesía. Y ha retomado su carrera
de Psicología.
-Así que muy LocoMia, pero de locos nada.
-No. La nuestra era una locura muy sana. Pero tiene razón
al decir que nos podría haber comido la noche. En los ochenta, cuatro
jóvenes en Ibiza, seis meses de temporada... Estábamos rodeados, pero
ninguno hemos caído en la droga. Y eso que he visto a muchos amigos
quedarse por el camino.
-¿Hay que tener mucha pluma para mover así el abanico?
-No, no. El abanico se asocia a lo femenino, pero fue
creado para el hombre y no para darte aire sino como arma de defensa.
Todos los bordes iban laminados con cuchillas y era para degollar al
enemigo. Esto nació en Japón y allí triunfamos porque lo vieron como
algo suyo.
-Habrá oído más de una vez que eso es una mariconada...
-Pues claro. Pero el abanico es un complemento más de nuestra imagen y el hábito no hace al monje.
-No sé si está ahora España como para mover el abanico...
-Rendirnos no nos va a ayudar a nada. A España hay que ventilarla. A ver si nuestros abanicos airean un poco este país.
-¿Lo suyo es puro 'gay power'?
-No sé yo. Nosotros nos dirigimos a todo tipo de público, incluidos los pequeñines, que flipan con nuestro vestuario.
-Creo que hasta han actuado para la Familia Real.
-Sí, en el Privé de Ibiza hacia el año 87. Tuvieron buena reacción, aunque no se movieron de sus asientos.
-¿Qué dijeron sus padres cuando le vieron mover el abanico?
-Yo se lo fui dando poquito a poco para que lo fueran
asimilando. Siempre me han apoyado, porque creo que nunca les he
defraudado como persona ni como hijo.
-¿Por qué no van de una vez a Eurovisión y nos salvan?
-Estuvimos seleccionados el año que fue Azúcar Moreno.
Nuestro mánager no quiso que fuéramos. No sé si arrasaríamos, pero sí
creo que nos íbamos a hacer notar.
-¿Ha ligado más con o sin abanico?
-Yo creo que he ligado lo mismo con abanico y sin abanico. O sea, bien poco.
-¿Y cómo ha encontrado la noche a su vuelta?
-Cambiadísima. Y a peor. Antes, incluso a pesar de la
droga, la gente era más respetuosa a la hora de llevar la fiesta. Hoy en
día sales por la noche... Bueno, yo ya es que ni salgo. Ves a la gente
joven que más que divertirse es como si se estuviera suicidando, porque
se ponen a reventar de todo.
-¿Milenium viene a arrinconar el Baile del Caballo?
-Qué más quisiera yo... Ojalá.
-Pues nada, larga vida a LocoMia... ¿O no?
-Claro. No le pongo límite, que dure lo que Dios quiera. Yo no tengo fecha de caducidad... Por el momento.
TÍTULO: CALLEJEROS VIAJEROS, MADAGASTAR,.
Madagascar es el paraíso
Este domingo nueva entrega de Callejeros Viajeros
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