jueves, 11 de julio de 2013

La última de JLo: «Fui una 'homeless'»,./ EL NIETO DE LADY DI,.

TÍTULO; La última de JLo: «Fui una 'homeless

Antes de convertirse en una deseada y millonaria celebridad de Hollywood, Jeniffer López era una chica del Bronx (Nueva York) que odiaba ...
La última de JLo: «Fui una 'homeless'» 
Antes de convertirse en una deseada y millonaria celebridad de Hollywood, Jeniffer López era una chica del Bronx (Nueva York) que odiaba la escuela tanto como le apasionaba bailar. Así lo acaba de confesar frente a su antiguo hogar, una casa ubicada en el corazón del peliagudo distrito de Nueva York, que cuenta con una altísima presencia hispanohablante. Agarrada a la valla que rodea la que fue su casa, la artista ha posado con vestidos de Prada y Dior, abrigos de pieles y sofisticados tacones que rompen la estética obrera del vecindario. Allí ha recordado cuando cantaba y bailaba frente al espejo, soñando con convertirse en la estrella que es hoy.
Su memoria también ha desempolvado las discusiones con su madre por querer dedicarse exclusivamente a sus estudios de baile. Tras una de sus habituales broncas la artista se «mudó» al sofá de la academia en la que estudiaba. «Fui una 'homeless'. Pero le dije a mi madre: esto es lo que tengo que hacer». Meses después estaba trabajando como bailarina en Europa y al cabo de un año abandonaba el Bronx para ir a Los Ángeles.
En la ciudad de los sueños arrancó su imparable ascenso a la fama, cuando empezó a acaparar los focos tras aparecer en los Grammy del 2000 enfundada en un Versace que tapizaba sus curvas y dejaba poco a la imaginación. Sus vivencias en el Bronx dejaron un poso de fuerza en el carácter de López, una infatigable corredora de fondo, cuyo camino, iniciado en el sofá de una academia de baile, está lejos de terminar. 

TÍTULO;  EL NIETO DE LADY DI,.

Gente

El nacimiento del nieto de Lady Di generará 284 millones de euros

En principio, y si los planes médicos no se tuercen, el sábado un funcionario del Palacio de Buckingham anunciará los detalles de la llegada al mundo del futuro heredero al trono de los Windsor,.
 
El nacimiento del nieto de Lady Di generará 284 millones de eurosTodo está meticulosamente preparado para este sábado. En principio, y si los planes médicos no se tuercen, ese día miles de súbditos de Isabel II jalearán la aparición de un funcionario del Palacio de Buckingham, que será el encargado de anunciar de manera oficial los detalles de la llegada al mundo del futuro heredero al trono de los Windsor: el primer hijo de Guillermo de Inglaterra y de Kate Middleton. Un protocolo real que se ha repetido un par de veces en las últimas décadas con el nacimiento del propio Guillermo, hace 31 años -«lloraba vigorosamente y tenía los ojos azules», se proclamó entonces-, y de su padre, el príncipe Carlos, hace 64.
También siguiendo con la tradición, la duquesa de Cambridge dará a luz en el pabellón privado del exclusivo hospital St Mary's de Londres. Son las mismas instalaciones en las que Diana de Gales alumbró a Guillermo y a Enrique, que cuentan con un servicio de lujo muy similar al de los hoteles de cinco estrellas. La corona británica pagará una factura de 6.000 euros por una noche de asistencia, según los tabloides de las islas. La mamá plebeya de este heredero real estará atendida en el St Mary's por el doctor Alan Farthing y por el ginecólogo personal de la reina, Marcus Setchell, que también ayudó a traer al mundo a los dos hijos de Sophie Wessex, la esposa del príncipe Eduardo, y que a los 70 años ha tenido que retrasar su jubilación para atender el último favor personal de su majestad.
Aquí se acaban las interferencias, porque la feliz pareja lo tiene todo controlado. Para empezar, la reina se enterará de la noticia cuando el príncipe Guillermo se lo comunique por teléfono -hasta ahora era un emisario de palacio el que daba la buena nueva-. Además, por deseo de los duques de Cambridge no se sabrá si el bebé es niño o niña hasta el mismo momento de su nacimiento. Los lores ya han modificado la ley de sucesión al trono -que desde hace 300 años otorgaba la primacía al varón- para que el primogénito, independientemente de su sexo, sea el heredero.
La duquesa también romperá con otra tradición al volver a casa de sus padres después de dar a luz y no contratará a ninguna niñera para hacerse cargo del bebé en el palacio de Buckingham. Parece que, según el expreso deseo de la duquesa, serán ella misma y Guillermo los que se encarguen de dar los biberones y cambiar los pañales. Pasados unos meses, lo lógico sería que los tres se mudaran al Palacio de Kensington, una residencia que la reina Isabel II habilitó para la futura llegada del heredero. La reforma realizada en el edificio, de 21 habitaciones repartidas en cuatro plantas, ha consistido en la sustitución de las estructuras contaminadas de amianto -empleado en otra época en materiales de construcción y que se considera cancerígeno- y ha costado 1,2 millones de euros, según consta en el presupuesto firmado por la propia monarca.
No son las únicas cifras que se manejan en torno a este nacimiento, uno de los más esperados en el Reino Unido en los últimos años. Las que dan más vértigo son las que reveló el diario 'The Telegraph', que la semana pasada publicó que este acontecimiento generará un negocio de 284 millones de euros, más incluso que el enlace de Guillermo y Kate. Antes de nacer ya tiene tanto tirón como su abuela Lady Di, que falleció un 31 de agosto de hace 16 años. De esos 284 millones, se calcula que 93 se ingresarán por la venta de souvenirs.

No hay comentarios:

Publicar un comentario