Vacunas sin agujas.
Kendall en uno de los experimentos con la vacuna.
Mark Kendall, un ingeniero biomédico con una fascinación por la resolución de problemas, ha desarrollado el llamado «nanoparche», un sistema que puede revolucionar el mundo de las vacunas ya que permite administrar las vacunas sin necesidad de agujas.
Son más de 160 años de uso de agujas y jeringuillas para la
inmunización y, dice, es el momento de dar un nuevo paso con un método
más simple, estable y más fácil de usar. «Las vacunas más modernas, del siglo XXI, se siguen administrando con un sistema desarrollado en 1853», aseguró el científico en una entrevista a Reuters desde su laboratorio en el Instituto Queensland de Biotecnología y Nanotecnología (Australia). «Un método eficaz en muchos niveles, pero con muchas desventajas».
Aunque los «nanoparches», Kendall todavía tienen que demostrar su eficacia en ensayos clínicos en humanos, sus resultados con animales han sido impresionantes. Lo suficiente como para convencer al gigante farmacéutico Merck, fabricante de muchas de las vacunas más vendidas en el mundo, para otorgar a Kendall una beca de investigación de tres años para desarrollar los ensayos en humanos.
Mínima dosis
Los «nanoparches» están diseñados para administrar una pequeña cantidad de vacuna justo debajo de la piel sin necesidad de pinchazos, logrando que el compuesto genere la misma respuesta inmune que una vacuna convencional con sólo una fracción de la dosis necesaria. Esto es posible gracias a que utiliza una vacuna «en forma seca», que no necesita la «cadena de frío» de refrigeración para su mantenimiento ni personal sanitario cualificado para administrarla. De hecho, Kendall considera que ambos factores son los que han impedido que muchas vacunas puedan llegar a países en desarrollo.
Una de las limitaciones fundamentales de las vacunas actuales, que impide que en muchas ocasiones lleguen a los países donde son más necesarias, es que necesitan de una «cadena de frío» costosa, además de personal especializado para su administración, ya que se hace por vía intramuscular. Y, apunta Kendall, en los últimos 30 años los inmunólogos han descubierto que la piel, a diferencia de los músculos, está llena de células inmunes, por lo que es un lugar mucho más idóneo para aplicar las vacunas.
Probada en animales
Esta nueva vía de administración ya ha sido probada en ratones con diferentes vacunas, como la de la gripe, la del virus del papiloma humano (VPH) o la de la enfermedad del Chikungunya. «Hemos demostrado que se necesita sólo una pequeña cantidad de la dosis, tal vez cien veces menor, para obtener la misma respuesta inmune», aseguró Kendall.
Además, entre otras ventajas de estos «nanoparches» está el hecho de que evitan el pinchazo, y el dolor consiguiente, y que su desarrollo sería barato (menos de un dólar por dosis, en comparación con los 50 que cuestan muchas vacunas ahora) y que es fácil de transportar.
Ensayos en humanos
Pero también reconoce que hay un largo camino por recorrer para que este nuevo mecanismo llegue al mercado, ya que hay precedentes que no tuvieron mucho éxito, como la biotecnológica austríaca Intercell, ahora propiedad de Vivalis (Francia), que intentó desarrollar un parche experimental para mejorar el sistema de vacunación contra la gripe A. Sin embargo, Kendall se justifica asegurando que esta vacuna tenía un modo muy diferente de acción, ya que debía aplicarse después de la vacunación con aguja para aumentar los efectos de ésta, a modo de adyuvante, mientras que su vacuna se aplica directamente, sin adyuvante. «Aplicamos el parche sobre la piel con un aplicador y obtenemos un alto nivel de control del antígeno liberado».
Además Kendall quiere que si su vacuna supera los ensayos clínicos y se comercializa sea accesible para los países más pobres porque, recuerda, que todavía hay 17 millones de muertes al año por enfermedades infecciosas, sobre todo en estos países, que a menudo no pueden pagar las costosas vacunas que podrían prevenirlos. «Esto podría cambiar el mundo de las vacunas, aunque todavía nos queda un largo camino por recorrer», ha reconocido.
TÍTULO; A FONDO,.DESNUDAMOS AL TRABAJADOR ALEMAN,.
en Valladolid
Trabajadores de Iveco se desnudan y simulan una crucifixión a modo de protesta por los despidos
Han querido escenificar que los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, "les han dejado en pelotas" tras el cese de 11 empleados,.
Los trabajadores de Iveco en Valladolid se han
concentrado este miércoles a las puertas de la factoría, donde dos de
ellos se desnudaron para ser "simbólicamente crucificados" a modo de
protesta por el despido de once trabajadores, tres de los cuales llevan
14 días acampados a las puertas de la factoría.
Con la protesta también buscan escenificar el hecho de
que los sindicatos mayoritarios CCOO y UGT "les han dejado en pelotas"
al no mostrarles su apoyo.
"Los dos desnudos escenifican y personifican el hecho de
que los sindicatos mayoritarios nos han dejado en pelotas porque,
después de dos semanas aquí, no han movido ficha para nada, todo lo
contrario, con sus artimañas nos han retrasado aún más lo que queríamos
hacer y definitivamente se han desmarcado los dos", ha señalado Óscar
Alvarez, uno de los acampados a las puertas de la factoría.
Injusto e injustificable
La fábrica despidió a los once trabajadores alegando
demasiadas bajas laborales, lo que el sindicato CGT tachó de "injusto e
injustificable".
No obstante, de los once despedidos, siete han liquidado
la cuenta con la empresa, mientras que los otros cuatro van a reclamar
la nulidad del despido porque entienden que vulnera sus derechos
fundamentales.
Con pancartas en las que reclamaban su readmisión y en
las que se apreciaban lemas como 'Comité Negociador, vendéis al
trabajador', 'Iveco criminaliza las bajas médicas', 'Despedidos
pactados, obreros parados' o 'Iveco crucifica a sus trabajadores', dos
de los despedidos se desnudaron y uno de ellos se crucificó a modo de
protesta.
Una nueva oportunidad
Óscar Alvarez, el despedido que se crucificó
simbólicamente a modo de protesta, señaló que han solicitado apoyo a
varias organizaciones y movimientos sociales como el 15-M o sindicatos
minoritarios e indicó que harán "todo lo que haga falta" con el fin de
que el responsable de Recursos Humanos de la factoría se retracte y les
de una oportunidad de "hacer algo".
CGT ha mostrado su apoyo a estos trabajadores y a la
lucha que están manteniendo contra lo que califican de "mala praxis" de
Iveco, "con su falta de sensibilidad y sus represoras tácticas de
intimidación hacia la plantilla, a la que pretenden acobardar con
estrategias que deberían estar perdidas en la memoria".
La protesta se ha desarrollado bajo el lema 'Estamos
desnudos ante las injusticias laborales; somos mártires de la avaricia
empresarial' y ha sido apoyada por el grupo de hard rock vallisoletano
'Dune'.
Los trabajadores de Iveco en Valladolid se han
concentrado este miércoles a las puertas de la factoría, donde dos de
ellos se desnudaron para ser "simbólicamente crucificados" a modo de
protesta por el despido de once trabajadores, tres de los cuales llevan
14 días acampados a las puertas de la factoría.
Con la protesta también buscan escenificar el hecho de
que los sindicatos mayoritarios CCOO y UGT "les han dejado en pelotas"
al no mostrarles su apoyo.
"Los dos desnudos escenifican y personifican el hecho de
que los sindicatos mayoritarios nos han dejado en pelotas porque,
después de dos semanas aquí, no han movido ficha para nada, todo lo
contrario, con sus artimañas nos han retrasado aún más lo que queríamos
hacer y definitivamente se han desmarcado los dos", ha señalado Óscar
Alvarez, uno de los acampados a las puertas de la factoría.
Injusto e injustificable
La fábrica despidió a los once trabajadores alegando
demasiadas bajas laborales, lo que el sindicato CGT tachó de "injusto e
injustificable".
No obstante, de los once despedidos, siete han liquidado
la cuenta con la empresa, mientras que los otros cuatro van a reclamar
la nulidad del despido porque entienden que vulnera sus derechos
fundamentales.
Con pancartas en las que reclamaban su readmisión y en
las que se apreciaban lemas como 'Comité Negociador, vendéis al
trabajador', 'Iveco criminaliza las bajas médicas', 'Despedidos
pactados, obreros parados' o 'Iveco crucifica a sus trabajadores', dos
de los despedidos se desnudaron y uno de ellos se crucificó a modo de
protesta.
Una nueva oportunidad
Óscar Alvarez, el despedido que se crucificó
simbólicamente a modo de protesta, señaló que han solicitado apoyo a
varias organizaciones y movimientos sociales como el 15-M o sindicatos
minoritarios e indicó que harán "todo lo que haga falta" con el fin de
que el responsable de Recursos Humanos de la factoría se retracte y les
de una oportunidad de "hacer algo".
CGT ha mostrado su apoyo a estos trabajadores y a la
lucha que están manteniendo contra lo que califican de "mala praxis" de
Iveco, "con su falta de sensibilidad y sus represoras tácticas de
intimidación hacia la plantilla, a la que pretenden acobardar con
estrategias que deberían estar perdidas en la memoria".
La protesta se ha desarrollado bajo el lema 'Estamos
desnudos ante las injusticias laborales; somos mártires de la avaricia
empresarial' y ha sido apoyada por el grupo de hard rock vallisoletano
'Dune'.
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