Algo pasa con 'Hellen'

-foto-Elena Tablada cancela apariciones y rehúye a la prensa tras su detención policial. Sus amigos aseguran que «ni bebe ni está desmadrada»

De llevar orgullosa el sello de 'Safe Driver' (conductora segura) en su carné de conducir estadounidense a terminar en una comisaría de Madrid a las cinco de la mañana por saltarse un semáforo en rojo, hacer un giro indebido y triplicar el índice de alcoholemia. De autodefinirse como persona «tranquila y muy casera» a dar la imagen de juerguista impenitente y aficionada a quemar la noche madrileña... Es evidente que algo pasa con 'Hellen' o 'Hellenicious', como la llaman sus amigos. Da la sensación de que en su vida hay un antes y un después de su separación de David Bisbal. Un antes más comedido y un después muy desmadrado.

Elena Tablada lo niega. Y sus mejores amigos también: «No es de beber mucho, en serio». Pero lo cierto es que desde la madrugada del pasado sábado, Tablada lleva una semana infernal, apenas coge el teléfono. Se siente «disgustada y arrepentida», tal como ha expresado en su blog, pero, de puertas adentro, también se muestra indignada e injustamente tratada. Piensa que «una vez más» se ensañan con ella. Y se pregunta quién pudo filtrar la noticia a la prensa.

Anoche se la esperaba en Marbella. La inauguración de un nuevo concesionario de coches de superlujo B&M Exclusive iba a ser la excusa para su primera aparición ante los medios tras su reciente condena. Su presencia estaba asegurada, había firmado un contrato... Pero Elena canceló en el último momento. Y por medio de un escueto 'whatsapp'. Detrás de esa decisión de última hora se esconde el ataque de pánico que sintió cuando intentó poner un pie en la calle y las 300 llamadas perdidas de periodistas registradas en su móvil. Otras fuentes señalan que la ex de Bisbal podría estar recibiendo también presiones directas por parte del entorno del cantante para que, siendo como es la madre de su hija (Ella, de tres años), guarde silencio y evite la exposición mediática. En cualquier caso, su infracción le está costando muy cara. Ha perdido prestigio y (a menos que venda una exclusiva) también dinero. Y eso que su caché ha bajado mucho desde que dejó de ser pareja de Bisbal. En Marbella, por ejemplo, iba a cobrar menos que Sofía Mazagatos.

La siguiente cita en su apretada agenda era la pasarela de moda Adlib, que se inaugura el próximo miércoles en Ibiza. Elena había asistido a la del año pasado y figuraba entre los famosos invitados a esta nueva edición. Sin embargo, tras el incidente policial su nombre se ha borrado de la lista. No parecía muy adecuado invitar a un acontecimiento que en parte se financia con dinero público a una persona de conducta poco ejemplar.

El papel de «mala»

Tablada tiene 32 años y cree en el 'karma'. Pero los 720 euros de multa y la retirada del carné por ocho meses que el juez le ha impuesto es un castigo por su reciente imprudencia al volante, no por deudas contraídas en otra vida. «Me han adjudicado el papel de mala», ha lamentado Tablada más de una vez ante sus amigos. Sobre todo, cuando la revista QMD la sacó en portada bajo el titular de 'Diecisiete horas de juerga'. «Elena no está desmadrada -explica una persona que la conoce desde hace años-. Es verdad que antes era más hogareña. Pero es que lo pasó fatal con su separación. Se sintió muy sola y encontró consuelo en un grupo de amigas (Raquel Revuelta, María José Suárez y Eva González) que son cañeras y les gusta salir. Por lo demás, ella es una madre entregada y una mujer bastante tranquila».

Ante quienes la tachan de ambiciosa, sus amigos alegan «que no ha sacado nada de su relación con Bisbal», con el que convivió varios años pero nunca se casó, y que «lejos de buscar otro novio rico o famoso, se ha enamorado de un chico normal como David Arigita». Nacida en Madrid y criada en Miami, nieta de un prestigioso cirujano plástico de origen cubano, Tablada, que se dedica al diseño de bisutería, pertenece a una estirpe de Elenas (su madre, su abuela y su hermana Naelé, Elena al revés) con las que forma una piña. «Soy buena al volante -declaró a esta periodista hace unos años-. En mi carné de conducir americano me pusieron 'safe driver', que significa 'conductora segura', por haber estado un año sin una sola multa»... Quien la ha visto y quien la ve.

TÍTULO: EL DOLOR DE RAQUEL,.

Gente

El dolor de Raquel

Colegas de profesión arropan a la presentadora de Telecinco tras la inesperada muerte de su marido,-foto- Mario Biondo, un cámara italiano con el que se casó hace un año

Pena profunda. ¿Cómo aliviar el dolor de una amiga...?». No encontraba respuesta Jorge Javier Vázquez, porque no la tiene. El presentador de Telecinco escribió ayer en Twitter una de las más sentidas condolencias a Raquel Sánchez-Silva. La presentadora de la sonrisa enorme acaba de perder a su marido, Mario Biondo, un cámara de televisión italiano de 35 años con el que preparaba el primer aniversario de boda, que se cumpliría el 22 de junio y con quien planeaba tener hijos pronto.

El jueves por la tarde, sobre las cinco y media, la mujer que les ayuda con las tareas domésticas encontró el cuerpo sin vida de Biondo en la casa de la pareja, en Madrid. Raquel se hallaba en ese momento grabando a las afueras de la ciudad. Los servicios sanitarios no pudieron sino confirmar el fallecimiento. La Policía trabaja en la hipótesis del suicidio.

Más allá de sus íntimos, la gran familia televisiva quiso mostrar públicamente su afecto y apoyo a una presentadora muy querida, a la que el programa 'Supervivientes' ha convertido en imprescindible. Fue precisamente en el rodaje del 'reality' en Honduras, en 2011, donde la extremeña (de 40 años) conoció a Mario. Un año después, en secreto, encargaba a su amigo Ion Fiz su vestido de novia, un original y veraniego traje con el hombro descubierto. La pareja se casó estrenando el verano en Taormina, un rincón de la Sicilia natal de Mario y compartió en Twitter las fotos del «día del amor»: «El día de nuestra boda. Emocionados, rodeados de familia, amigos, felicidad». Así se mostraban siempre en público: «Es el mejor hombre de la Tierra y es mil veces mejor que yo», le adornaba de virtudes recientemente a su chico Raquel, con esa sonrisa suya de felicidad... y de entusiasmo por la vida y el trabajo. Era así: ahora que lo hace casi todo ('Pekín Express', 'Supervivientes', 'Acorralados, 'El cubo'...) y también cuando empezó en el mundillo, una vez acabada la carrera de periodismo en Salamanca, en una tele de su Plasencia natal, tierra que Mario ya conocía.

Aunque quedó pronto huérfana de padre, su madre sigue viviendo allí y Raquel siempre se ha sentido cerca del lugar que la vio crecer y destacar en el colegio (hacía dos cursos en uno), en el voleibol (jugó un año en División de Honor)... y buscarse la vida trabajando de camarera antes de que llegara la tele, donde se ha convertido en una de las valedoras de Mediaset.

Ayer, colegas de la casa y de la competencia resumían en 140 caracteres su pesar. La primera fue Mercedes Milá, que supo del trágico suceso el mismo jueves por la noche, mientras presentaba la gala de 'Gran Hermano': «He recibido una noticia que nos ha taladrado. Es horroroso. Raquel, mi vida, fuerza, estamos todos contigo». Y en las horas siguientes se sucedían las palabras de ánimo en Twitter: «No he conocido nunca a una mujer tan enamorada, tan luminosa cuando iba al lado de su amor» (Máxim Huerta), «A veces la vida es jodidamente trágica» (Risto Mejide), «Nada consuela el tremendo dolor cuando un amor se va de manera tan repentina» (Chenoa), «El mundo de la televisión pasa hoy a un segundo plano, estamos contigo» (Christian Gálvez)... El equipo de 'MasterChef' (TVE), programa en el que trabajaba actualmente Mario, lamentaba «profundamente la pérdida de un amigo» y Eva González se quedaba «sin palabras».