La Zona, por @numeroteca
Quiero escribirme esto para poder recordarlo. Hace tres días empezó todo. Comenzó como si nada, con unas maniobras policiales que evacuaron urgentemente la plaza el martes por la tarde. Me llamó Manu para que nos acercáramos a mirar. Una vez allí no pudimos entrar a ver lo que pasaba, pero nos temimos lo peor. Nueve cordones policiales impedían el paso. Los metros y cercanías no paraban en la estación. No le dimos mayor importancia, a pesar de no entender nada, pero al día siguiente se volvió a repetir. En internet lo empezaban a llamar “la Zona”.
A las ocho de la tarde la policía evacuó de nuevo la plaza y la mantuvo cerrada hasta la mañana siguiente. Parecía que la Zona estaba vacía, pero Miguel y yo sabíamos que algo tenía que estar pasando allí, especialmente por las noches. La gente se congregaba en los accesos para mirar en su interior, pero los cordones policiales estaban cada vez más lejos de la plaza, y entre policías, furgonetas y vallas, apenas podía verse nada. Suerte que nos encontramos con un tal Fredo que nos dejó subir a su casa en la calle Montera para echar una ojeada. No veíamos especialmente bien, pero la policía daba espalda al centro de la plaza, donde un vacío inquietante era casi palpable. Cansados de mirar al vacío y del largo paseo que habíamos dado por un Madrid veraniego, volví a casa en bici por las calles desiertas. Todavía no me había recuperado del jet lag, las noches se alargaban hasta el amanecer y yo sin pizca de sueño.
Hoy la cosa ha ido a peor. La Zona ha sido tomada por la policía desde las doce de la mañana. Han desalojado bares y tiendas colindantes. La gente ha empezado a preocuparse. Me he acercado de nuevo por allí, esta vez con Guille y Andrea, para ver si veíamos algo. Los nueve accesos estaban más blindados que nunca y la gente empezaba a formarse en torno a ellos pidiendo entrar. Había algo de excitación en todo el mundo, pero nadie sabía muy bien por qué. En algunos de los cordones policiales ha habido forcejeos, en otros un diálogo con los policías, que negaban abiertamente, como siempre, saber por qué estaban allí. He visto los primeros carteles y protestas demandando la libre circulación en el espacio público pero los antidisturbios no atiende a razones ¡lógico!
De vuelta para casa, en Velázquez con Goya me he encontrado con una reuniónde unas veinte personasen plena calle que estaban hablando sobre el tema. Me he acercado a preguntar tras oír algo sobre la Zona. Me han contado que ese tipo de reunión no es ni la primera ni la más grande, que la gente se ha estado reuniendo para tratar el asunto en grupos mucho más numerosos en el resto de plazas colindantes. También me han dicho que ha habido una carga policial en el Ministerio del Interior en Castellana, cuando han ido a protestar sobre la falta de información de lo que estaba pasando en la Zona. Han detenido a tres, uno de ellos un periodista (lo acabo de leer por twitter) y hay varios heridos. No sé si será el jet lag o que he estado muy absorto con la Zona, porque no me había enterado de nada de eso en la calle. No tengo muy claro si a la gente le gusta la Zona. Noto que las cosas han cambiado en esta ciudad desde que me fui ¿será la Zona la causante de que la gente esté más unida y dialogante?.
Mucho me temo que mañana ya no se pueda entrar a ninguna hora del día. La Zona parece cada vez más poderosa y cerrada, espero que la policía no haga ninguna tontería. Acabo de leer en internet que Rouco se ha puesto manos a la obra (ejem…) y ha llamado al Papa para que venga a exorcizar la Zona. Parece que estamos en el siglo dieci… veinte. Twitter mientras está que arde con la Zona… no le deseo a nadie que haya réplicas en su ciudad… aunque en el fondo me gusta. Mañana espero llegar pronto.
- Tuve que cerrar la puerta del pasillo. Han tomado la parte del fondo. Dejó caer el tejido y me miró con sus graves ojos cansados.
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