miércoles, 26 de octubre de 2011

LA DESPENSA DE EUROPA.

Las condiciones climatológicas del sur de Andalucía convierten a esta zona en la más activa de España en producción hortofrutícola, con casi 2,5 millones de toneladas anuales, que nutren el 30% de los mercados europeos y en los meses invernales llegando incluso al 80%.

Gracias a su localización geográfica, a caballo entre dos mares y con un clima templado-cálido, se considera a Andalucía, concretamente al área oriental (Almería y Granada), la mayor reserva invernal de luz solar de Europa.  Esto se debe a que la “luz y la temperatura son dos elementos básicos para el crecimiento adecuado de los cultivos y en los invernaderos del sur esto lo reciben sobradamente”, así lo asegura María José Pardo, gerente de HORTYFRUTA, Organización Interprofesional de Frutas y Hortalizas de Andalucía, que agrupa al 70% de la producción y exportación de productos hortofrutícolas bajo abrigo.
El sector agroalimentario de Castilla y León es uno de los más dinámicos y pujantes. A pesar de la crisis, las inversiones se han ido sucediendo hasta lograr emplear a la cuarta parte de los trabajadores no industriales de la región (38.000) y factura 9.500 millones de euros al año.
Los datos hablan por sí solos de la realidad económica, pero los condicionantes sociales de estos números son más que destacados: el sector está compuesto por 3.300 empresas, en su mayoría de pequeñísimo tamaño (el 90% tiene menos de 20 empleados) y la inmensa mayoría se enclavan en el medio rural, lo que les ha convertido en uno de los escasos elementos capaces de fijar población y crear empleo en los pueblos de Castilla y León.
Los subsectores más importantes dentro de la industria agroalimentaria en Castilla y León son el cárnico, con el 32% de la producción, el lácteo, con el 16%, el de alimentación animal, con el 14%, el de pan y galletas y el de azúcar y derivados, con el 7% en ambos casos, y el de vinos, con el 6%. Entre estos seis subsectores llegan al 82% del total de la facturación de ventas de las industrias.

Lea la edición impresa del extra 'Alimentos Castilla y León' Esta tierra atesora con una riqueza agroalimentaria enorme. Considerada como la despensa de Europa, el Inventario de Productos Agroalimentarios de Calidad del año 2000 reconocía la existencia 252 alimentos tradicionales, de los que medio centenar (59 si se incluyen las menciones vitivinícolas) cuentan con alguna figura de protección que vela por su calidad.

I Plan

El impulso determinante del sector agroalimentario llegó de la mano del I Plan de Promoción y Comercialización 2008-2011, un ambicioso plan al que el Gobierno regional ha destinado 867,9 millones de euros y con el que perseguía incrementar un 25% el valor de la producción bruta de las fábricas, hasta superar los 10.000 millones de euros, y elevar un 30% el valor del consumo de materias primas procedentes de la Comunidad por estas actividades, por encima de los 2.500 millones. El tercer objetivo pasaba por duplicar sus exportaciones, hasta los 1.900 millones de euros y consolidar la imagen y posicionamiento de calidad de los productos agroalimentarios de la región, además de facilitar el acceso de pequeños y medianos productores, mejorando la eficiencia en la distribución a agentes con mayor poder de compra en el mercado.

Tierra de Sabor

Uno de los momentos determinantes del desarrollo de este plan ha sido el nacimiento de Tierra de Sabor, una marca de garantía que opera con todos los alimentos de calidad de Castilla y León y que nació con el objetivo de distinguir en el mercado la calidad de diferentes productos agroalimentarios producidos en esta tierra, logrando generar un valor añadido para los productos que se generan en tierras castellanas y leonesas.
Desde su nacimiento en 2009, el corazón amarillo que simboliza Tierra de Sabor no ha dejado de sumar productos, hasta el punto de que la Consejería de Agricultura considera que la marca ya ha tocado su techo objetivo. Pero lo más destacable es que este logotipo de ha asentado en las grandes cadenas de distribución nacional, convirtiéndose en un escaparete idóneo, tanto para la marca como para los productores y productos de Castilla y León que, en algunos casos como el de los Artesanos Alimentarios, les ha permitido incrementar su facturación un 128% entre 2009 y 2010.
Según la consultora independiente Nielsen, la marca de calidad Tierra de Sabor es conocida por el 60% de los consumidores a nivel nacional y por un 98% de los de Castilla y León.

Sectores

Por sectores, el cárnico es el que mayor relevancia económica tiene en Castilla y León, alcanzando una facturación de 2.300 millones de euros y liderando la producción de jamones y paletas ibéricas con denominacnión de origen en España, donde Guijuelo detenta el 65% de la producción nacional.
El segundo sector en importancia económica es el lácteo. Castilla y León lidera a nivel nacional la producción de leche de oveja (300.000 toneladas, casi el 65% del total nacional) y es la segunda comunidad productora de leche de vaca. Esta producción es transformada por 161 empresas que elaboran 102 millones de quesos por campaña, con una facturación de 1.423 millones de euros.
El liderazgo en este sector llega a tal punto que el 70% del queso de oveja que se fabrica en España tiene su origen en esta tierra, aunque en su comercialización el origen se diluye. Para evitar esto, la Junta creó la marca Queso Castellano, que ya cuenta con 26 empresas y una producción de un millón de kilos, pero su potencial llega a los 12, lo que permitiría superar a la comunidad manchega.
El sector hortofrutícola trambién ocupa un papel más que relevante, con cerca de 30.000 hectáreas y un volumen de negocio que llega a ser el 20% del total de la producción agrícola de la Comunidad. En este campo, la patata es el alumno más aventajado y líder en España de producción, con 22.000 hectáreas y 840.000 toneladas de producción. Pero también es importante la producción de puerros, de zanahorias...
Con gran sabor aunque con producciones modestas se presentan las legumbres de Castilla y León, que cuentan con cinco figuras de calidad reconocidas y numerosas producciones singulares por todos los rincones de la geografía regional.ANDALUCÍA, LA DESPENSA DE EUROPA- foto.
Otro capítulo destacado de la producción agroalimentaria de Castilla y León es la dedicada a producir derivados de cereales, entre los que destacan la industria galletera. Además, el pan de Valladolid ha sido el primero en Europa en lograr una marca de calidad oficial.
El panorama agroalimentario de Castilla y León se complema con la cada vez más numerosa producción de alimentos ecológicos, otras figuras de calidad como las mantecadas de Astorga o el hornazo de Salamanca y especialidades tradicionales como la leche de granja o el jamón serrano. Todo un elenco de productos de calidad que se están imponiendo poco a poco en la gastronomía actual.

1 comentario:

  1. Yo apuntaría que hay muchas personas que figuran en el paro, pero que realmente están trabajando en las fincas agrícolas (antes las tenían arrendadas o se han ido a trabajar a la finca de un familiar al perder el empleo en la costrucción.

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