plaza españa: DE PERFIL.Un italiano en la agenda de Monago.

sábado, 24 de diciembre de 2011

DE PERFIL.Un italiano en la agenda de Monago.

Hombre reservado, aterriza en la región tras pasar por la Universidad de Salamanca .

SEGÚN los tópicos, los vecinos de Turín rompen la imagen del típico italiano robacorazones y fanfarrón. Vamos, que son los menos 'donjuanes' del país de la bota. A fin de cuentas es gente que vive en el norte, cerca de Francia y del Valle de Aosta, y ya se sabe que el frío suele afectar el carácter a la baja. Giorgio Darío Cerina, el nuevo coordinador de la Agencia Extremeña para Cooperación Internacional al Desarrollo, es turinés. Lleva varios años en España, donde se doctoró en Derecho por la Universidad de Salamanca y donde también ha trabajado como investigador para la universidad de Castilla-La Mancha, en cuyo Instituto de Derecho ha estado hasta principios de noviembre. En la capital del Tormes seguramente se sintió como en casa, tanto por el ambiente universitario que se respira como por el murmullo del río charro, que le recordaría al famoso Murazzi que corre por su localidad. También por el carácter de los salmantinos, acerca del que el imaginario popular determina exactamente lo mismo que la definición que hacen de los turineses en Italia: «Son cerrados cerrados, pero si se consigue trabar amistad con uno de ellos será eterna por lo leales que son».

Por lo poco de la ficha personal que todavía se conoce en Extremadura de este italiano al que ha contratado la consejería de Nevado-Batalla, en principio se puede decir que se ajusta a ese prototipo de gente reservada a la que no le gusta llamar la atención. Algunos de los que le han conocido en el poco más de un mes que lleva en Extremadura lo han hecho en las recientemente celebradas jornadas de Responsabilidad Social y corroboran su discreción cuando cuentan que le costó trabajo tener que subir a la mesa de una de las ponencias de ese foro, en la que se reclamaba su presencia para ir presentándole al público.

Es lo que hace estos días, conocer a la gente con la que tendrá que trabajar en y desde la Agencia Extremeña para la Cooperación, dependiente de la Consejería de Administración Pública, donde acumulará las competencias que antes tenían tres personas. La Junta no lo confirma, pero la conexión con Extremadura parece provenir del propio consejero de Administración Pública, Pedro Nevado Batalla, del que ha sido alumno al menos en un master de la universidad charra.

El currículum de Cerina parece lo suficientemente fuerte como para apostar por él, que es lo que hizo precisamente la ONU cuando le contrató para su Instituto Interregional: elegir su carta de presentación entre la de otros postulantes que se remitieron desde todo el mundo. También la Universidad de Salamanca, que le concedió un puesto de investigador.

La llegada del italiano a la Junta de Extremadura ha encontrado hueco incluso en el periódico 'La Stampa', donde el jueves se publicaba la noticia bajo el título «Giorgio, un cerebro a la fuga». Hay gente que se mueve en el sector de la cooperación regional a la que, sin embargo, no le ha hecho gracia que un italiano, por muy europeo que sea, ocupe un cargo como el de la coordinación de la Agencia Extremeña de Cooperación.

Creen que no habría hecho falta salir de la región para encontrar cartas de presentación como las del turinés, que es especialista en cooperación internacional, sobre todo iberoamericana, uno de los destinos principales de la solidaridad extremeña. Por eso hay quienes le miran con recelo y esperan con expectación que demuestre que realmente vale lo que pone en los papeles para gestionar los 14 millones destinados a cooperación internacional.