domingo, 30 de diciembre de 2012

LA CARTA DE LA SEMANA CON EL AÑO 2013, LO MEJOR/ EL BLOC DEL CARTERO--EL CARTERO Y SUS CHICAS,.

TÍTULO: LA CARTA DE LA SEMANA CON EL AÑO 2013, LO MEJOR.

Los lectores, a través de la página web del periódico, nos dan su opinión sobre si estiman que en el 2013 será mejor que este año.
“No estaremos mejor, esa es la verdad, o al menos es lo que yo pienso. Este año ha sido muy malo, pero aún así, no pienso que el que comienza ahora vaya a ser mucho mejor”.
“Tenemos que ser optimistas; será mejor año. El 2012 ha sido muy malo y la gente está algo más concienciada. Entre todos tendremos que empujar adelante y no acomodarnos”.
“Sí, yo soy de la opinión positiva. Tenemos que ser, en estos momentos, un poco optimistas de cara al futuro. Así que mi opinión es que sí que vamos a estar un poco mejor que ahora”.
“Estaremos peor porque creo que la destrucción de empleo va a seguir creciendo y eso significa que muchas empresas de la provincia van a tener que cerrar sus puertas”

Los lectores, a través de la página web del periódico, nos dan su opinión sobre si estiman que el 2013 será mejor que este año.
“Objetiva y subjetivamente no. Es mi opinión. No creo que vaya a mejorar la cosa. Yo lo tengo muy claro y pienso que es bastante evidente que así será; no hay más que ver lo que pasa”.
“Si, pienso que estaremos mejor. Hay que ser optimistas y yo lo soy. Igual no es un buen año, pero de entrada, yo pienso que hay que tener esperanza para que sí sea algo mejor el 2013”.
“Opino que no vamos a estar mejor, pero me gustaría que, por lo menos, el 2013 fuera igual que este año. Para que se quede todo igual algo tendría que mejorar muy deprisa ahora”.
“Yo tengo claro que en el año próximo vamos a estar igual que ahora. Lo único es que deberíamos tener esperanza y eso es lo que voy a hacer, voy a mantener la esperanza en 2013”.

TÍTULO: EL BLOC DEL CARTERO--EL CARTERO Y SUS CHICAS,.

Mario conoció en una hostería a una chica (Beatriz) de la que se enamoro profundamente; de ella mas tarde hablo con Pablo Neruda al que le pidió ayuda para poder conquistar. Esta ayuda le sirvió de mucho, ya que consiguió que ella se enamorara de el, pero Pablo Neruda recibió una carta donde ponía que se debía presentar a las elecciones de Chile; al tener que marchar Pablo Neruda, Mario comenzó a escribir metáforas, poemas, etc con las que enamoraría mas a Beatriz.
Los murmullos que habían en el pueblo sobre la afición a escribir de Mario, a el no le importaban ya que había conseguido el amor de Beatriz; pero lo que si le importo fue la intervención de Rosa, la madre de Beatriz, la cual no quería que esa relación siguiese hacia a delante.
La suegra envío una carta a Pablo Neruda para que le ayudara a romper la relación de Mario y su hija. En cuanto volvió Pablo Neruda de su viaje con la noticia de que le había pasado su cargo como candidato a las elecciones de presidencia de Chile a Salvador Allende, recibió la carta de manos de Mario. Pablo Neruda hablo con Rosa sobre esta relación y le dijo que lo intentaría pero que estaba seguro de que no serviría para nada.
Con la noticia de que Salvador allende había ganado las elecciones se celebro en la hostería de doña Rosa su victoria. Gracias al ingenio de Mario, Bea y el, se pudieron ver a solas y esta fue la primera vez que hicieron el amor.
Mario dejo embarazada a Bea y Rosa no tuvo mas remedio que dejar que se casasen .Como Pablo Neruda se tuvo que ir a Paris como embajador, Mario perdió su trabajo de carteo ya que el era el único al que le enviaban correspondencia, por eso su mujer y su suegra le dijeron que se buscase un trabajo; dio la casualidad que a doña rosa le ofrecieron el proyecto de cambiar su hostería por un restaurante y esta le ofreció el puesto de cocinero a Mario.
Mario recibió la primera carta de Pablo Neruda donde le decía que le grabase los sonidos característicos de su pueblo por que los echaba en falta. Mientras que Mario esta consiguiendo el deseo de Pablo Neruda en Chile se esta empezando a notar la mala forma de gobernar que tiene el presidente Salvador Allende.
Por fin nace el hijo de Bea y Mario que se llama don Pablo Neftalí Jiménez González y también le dan el premio Nóbel de literatura a don Pablo Neruda.
Al poco tiempo los problemas políticos de Chile aumentaron y Pablo Neruda volvió a su pueblo muy enfermo, una mala noticia que le dio Matilde (esposa de Pablo Neruda) a Mario. Con el asesinato de Salvador Allende en Chile los problemas de Pablo Neruda incrementaron con lo que necesitaba mas protección, con esa protección a Mario le costo mucho llegar hasta Pablo Neruda, pero lo consiguió y se les pidió de el para siempre.
Definición de personajes:
Mario Jiménez: es el protagonista de la historia, es un adolescente de 17 años que tiene una gran ilusión por la vida aunque en ocasiones peca de ingenuo.
El es huérfano de madre y de familia pobre, aunque su padre se mate ha trabajar en la pesca.
Por lo que se cuenta en la historia en un chico que deja pasar los rumores y muy entrometido en las cosas que de verdad le importan, como puede ser su esposa o la literatura.
Pablo Neruda: es un escritor muy famoso y en esta novela sale en el último tramo de su vida en los años 60 en Chile.
En la novela no se cuenta mucho sobre como es el, pero según la novela se puede decir que es un señor muy amable y que es muy amigo de sus amigos.
En la novela sale como el segundo padre de Mario ayudándole en lo que puede y con una gran interacción en la política.
Beatriz González: es una adolescente de 17 años como Mario que aparece como el gran romance de Mario.
Es una chica muy soñadora e ilusionada con todo, tratando la mayoría de los temas como una cría que quiere conseguir lo que desea. También aparece como una adolescente muy sedienta de sexo y sin tener en cuenta las consecuencias que le puede conllevar.
Rosa González: esta señora es la madre de Beatriz y la suegra de Mario, la que le producirá muchos problemas a este. Es muy protectora con su hija ya que es viuda y la esta criando sola.
Desde el principio esta rechazando la historia de amor surgida entre su hija y Mario, aunque terminará por aceptarla.
Tratamiento del amor:
En esta novela se trata muchísimo el tema del amor, ya que la historia entre Beatriz y Mario esta presente en casi toda la novela.
Mario es el adolescente enamorado que desea encantar con sus posibilidades a su amada.
Pidiéndole ayuda a su amigo Pablo Neruda quiere enamorarla y conquistarla para siempre; Pablo Neruda le da unos consejos pero sobre todos está el consejo de la poesía, lo que quiero decir es que podía conquistarla o con sus propias palabras de amor o también podía utilizar poemas del propio Neruda en su provecho.
Al conseguir conquistarla se une el problema de la suegra, pero ellos como buenos enamorados lo intentan ante todo y todos.
La chica de igual manera esta enamorada de el pero confunde lo que es el amor con el sexo en repetidas ocasiones.
Por fin al conseguir estar juntos viven un amor pasional y desenfrenado en lo al sexo se refiere, aunque de igual manera tratan el amor pero mas como una pareja con responsabilidades y cargos que no pueden dejar.
Por supuesto su amor se incrementa con el nacimiento de su primer hijo, con lo que ya han conseguido formar una verdadera familia de aquella época en Chile.
La política, relación entre Salvador Allende y Pablo Neruda:
La novela esta totalmente inmersa en el ambiente de la política de aquella época. Aquí existían lo demócratas, los socialistas y, ante todo, los comunistas como Pablo Neruda y Salvador Allende; esta es la relación que existe entre ellos, que son del mismo partido.
A Pablo Neruda le envía una corta donde se le comunica que ha sido elegido para participar en las elecciones de la presidencia en Chile.
Este al no querer este cargo se lo pasa a Salvador Allende, quien sale elegido presidente en las elecciones de su país.
Toda la gente de ese país estaba feliz con su presidente aunque al poco tiempo se dieron cuenta de que no cumplía con su cometido y que era un mal presidente.
Por esta razón surgieron las revoluciones contra él, revoluciones a cacerolazos pero que cada vez se iban haciendo mas fuerte.
Llegaron hasta tal punto que asesinaron al presidente Salvador y con el corrían peligro todos los comunistas de ese país, por lo que la mayoría fueron exiliados. Pablo Neruda que estaba muy enfermo no fue exiliado, pero porque era demasiado tarde para el ya que estaba apunto de morir.

ENTREVISTA XL SANTIAGO USERON EN LA MOVIDA DESEÁBAMOS UN PAÍS NUEVO.¡INTENTÉMOSLO,/ EN PRIMER PLANO TODO POR SALVAR A MI HIJO,.

TÍTULO: ENTREVISTA XL  SANTIAGO USERON EN LA MOVIDA DESEÁBAMOS UN PAÍS NUEVO.¡INTENTÉMOSLO,.

Santiago Auserón: "En la Movida deseábamos un país nuevo. ... el momento de la entrevista parapetado tras una trinchera: el ensimismamiento. ... XL. ¿Y cuál supuso, tras su escucha, un antes y un después en su forma de ...
 

Santiago Auserón: "En la Movida deseábamos un país nuevo. ¡Intentémoslo!"

Del líder de Radio Futura se dice que aprendió a reinventarse tras el "Tsunami" de la movida madrileña. Lo hizo camuflado en un alias -Juan Perro- y manteniendo intacta la mecha para seguir apostándolo todo a la música.
Sentado frente a un libro y un cortado, ajeno al mundo que gira a su alrededor, Santiago Auserón [Zaragoza, 1954] aguarda el momento de la entrevista parapetado tras una trinchera: el ensimismamiento. Nadie parece reconocer al ex Radio Futura, transmutado en Juan Perro, en esta tarde de perros, urgencias cappuccineras y tráfico congestionado. Nochea la Gran Vía madrileña ahí afuera, en helor crepuscular, y el músico se levanta cortés al reconocerme; con la mano extendida y media sonrisa cordial por delante. Si en algo se percibe la edad en su rostro, es por alguna arruga de más, como a un Dorian Grey maño al cual un pendiente en forma de aro, enhebrado en el lóbulo de su oreja izquierda, otorga un punto canalla. Aun así, no hay nada de rock star en su mirada. ¡Dios nos libre y, sobre todo, libre a las grabadoras, de rock stars! Me invita a sentarnos, pide otro café, sonríe de nuevo y se dispone a responder mis preguntas como si en cada una le fuera la vida. Rebosante de actitud, de sensatez, de firmeza.
XLSemanal. ¿Qué tendría que ocurrir para que volviese la efervescencia de la Movida ochentera a España?
Santiago Auserón. Tendría que haber una mayoría de españoles con ganas de inventar un país nuevo.
XL. ¿Lo tiene más complicado un joven músico de ahora que uno de 1982?
S.A. Sin lugar a dudas. Nosotros disfrutamos de un momento privilegiado en el que la sociedad española estaba deseosa de novedades. Y se nos proyectó hasta el primer plano de la escena. Yo entonces era un estudiante de doctorado de Filosofía que acababa de volver de París, y me puse a enredar en un local de ensayo. Y de repente me vi envuelto en una serie de acontecimientos que me arrastraron hacia una vida muy divertida y fascinante.
XL. ¿En qué momento vio que lo suyo era el escenario?
S.A. Nos empezaron a ir bien las cosas, lo cual manda mucho. Tuvimos la sensación de que estaba pasando algo y teníamos que responder. Había que hacerse profesionales sin habernos formado previamente ni en conservatorios ni academias. ¿Y cómo se hace eso? Pues relacionándote con los mejores, quemando etapas. Y eso es un reto por sí mismo. Conseguir hacer canciones que no sean tontas necesariamente. Que admitan algún contenido poético.
XL. ¿Y cuál supuso, tras su escucha, un antes y un después en su forma de comprender la música?
S.A. [Piensa largo rato]. Más que de un tema, te hablaría de varios umbrales en mi formación como oyente. En la infancia, el impacto de los grupos británicos que transmitían indirectamente la música de los negros norteamericanos fue muy fuerte. Habíamos oído en casa música negra porque, a través de la Base Americana en Zaragoza, llegaban discos de Louis Armstrong, Duke Ellington y Ella Fitzgerald. Pero, para los críos, la revolución mental llegó cuando empezamos a oír a los Beatles, a los Stones, a los Animals, a los Kinks. En la adolescencia, nos impactó el soul. Y Dylan supuso una experiencia. Han sido muchas veces las que he sufrido esos tsunamis sonoros.
XL. ¿Y ahora?, ¿los sigue sufriendo?
S.A. [Sonríe]. Desde hace unos años, el son cubano. Cuando viajé por primera vez a Cuba, el impacto de la música de los negros y mulatos cantando en español me voló la cabeza.
XL. El Ebro y el Misisipí, en su caso, ¿son el mismo río?
S.A. El río de la vida nos arrastra a todos en cualquier orilla que estemos. Sin embargo, en mi infancia en Zaragoza, por las razones que fuese, aunque no fuese culpa del río Ebro, se oían canciones de los negros del Misisipí [sonríe].
XL. ¿Qué tienen, en lo musical, los negros?
S.A. Primero, una cultura en la que el ritmo es una forma de pensamiento. Es vinculación social. El artista de tambores es el centro de la tribu. El lenguaje depende de él. La cultura rítmica se enseña a los niños recién nacidos. Es una cultura muy distinta a la occidental, en la cual, a pesar de que el ritmo también es vehículo educacional, se orienta todo enseguida hacia el dominio jerárquico de la palabra. En el África negra, la palabra es una de las modalidades del sonido, que sirve para cantar o para hablar. Cuando el siglo XX nos devuelve el sentido rítmico de los negros a través de las telecomunicaciones, somos nosotros los que no estamos entrenados para entender que eso es un sistema de pensamiento, y nos lo tomamos como mera frivolidad, vacilón, juego de seducción y punto.
XL. ¿Se atreve a explicárselo al ministro José Ignacio Wert para que lo tenga en cuenta en futuros planes de estudio?
S.A. En una charla educada y amable sí, se lo explicaría. Pero antes me correría prisa discutir otras cosas. Tengo la sensación de que, de manera deliberada o imprudente, están metiendo la cultura en un puño que pueden apretar a voluntad para asegurarse el goteo. Y eso es peligroso.
XL. Algunos afirman que la situación recuerda, sospechosamente, momentos complicados del pasado.
S.A. Claro que sí. Hay un momento ahora mismo en el terreno de la reforma laboral, y de las prestaciones sociales y la cultura, en el que estamos retrocediendo a situaciones pretransicionales. Hay que preguntarse: «¡Señores!, ¿qué está pasando aquí?». Es un tema de soberanía popular. No podemos seguir creyéndonos que somos partícipes de una democracia cuando realmente los sistemas de participación de la misma se están estrangulando. Hace falta una reforma social muy profunda que no podemos dilatar más.
XL. Entonces, ¿cómo salimos de esta?
S.A. Tenemos que aspirar, sin caer en la barbarie, a que la democracia sea real, participativa. Y, sobre todo, a seguir formándonos como ciudadanos para continuar teniendo la osadía de inventar nuestro país como queremos inventarlo la mayoría. Pero con respeto para las minorías también.
XL. Y eso solo se puede hacer desde las aulas.
S.A. Exacto. Si en tiempos de Felipe González se diseñaron unas campañas comiéndole la cabeza a la gente de que había que hacer marca España a través de deporte y lo estamos consiguiendo, con lo demás también se podría hacer. Si, gracias a esas estrategias, en 20 años hemos logrado llevar a los chavales al primer puesto del podio internacional en materia deportiva, en lo cultural y con la investigación se debería hacer exactamente lo mismo. Invirtiendo el mismo esfuerzo en I+D que en cultura, en el patrimonio de nuestras letras o en el conocimiento de la historia.
XL. ¿Es usted un 'negro' del Ebro? 
S.A. Sí, bueno. En cierto modo, bromeando. A mí, lo de los colores me importa poco. Me importa más la calidad de los ritmos y las substancias que nos intercambiemos. La limpieza de lo que nos llevemos a la boquita [sonríe].
XL. ¿Y cómo ve un 'negro' del Ebro estos tiempos tan negros que estamos viviendo?
S.A. Yo creo que ha habido tiempos peores. La caída del Imperio romano, la peste en Sevilla de mil seiscientos y pico... [sonríe]. No hay que exagerar. Lo que hay que tener claro es hacia dónde queremos ir. No andar tan perdidos.
XL. ¿Qué puede cambiar la música en tiempos de crisis?
S.A. Tu estado de ánimo, si eres capaz de conectar con la tribu que la toca. Si aprendes de esas sensaciones efímeras, tienes un arma para renovar energías. No puede arreglar el problema de la sanidad, pero sí mejora el rollo [sonríe].
XL. La prima de riesgo ¿se soporta mejor con música?
S.A. Con buena música, sí. Si sonasen buenas canciones en nuestros medios de comunicación, sería señal de que otras cosas de esta sociedad están yendo mejor.
XL. Lo contratan para poner letra al himno de España... 
S.A. No, no, no aceptaría. No me gustan nada los himnos. Además, si tiene que haber un himno patriótico en nuestro país, es mejor que no tenga letra. Es mejor una musiquilla que suene y nada más. No le vamos a meter ahí trascendencia, simbología. No es bueno hinchar las cosas.
XL. Aun así, no le vendría mal un toquecito flamenco.
S.A. [Sonríe]. A ver, a ver... No te creas que sería fácil. Mmmmm... [tararea]. ¡No, sonaría un poco a cachondeo!
XL. Se entera uno por su libro que 'movida' significaba «partida de delincuentes» en el Siglo de Oro. 
S.A. Y en los años sesenta, en Madrid, era eso. Hacerse una movida era sinónimo de ir a dar un palo, y luego, de ir a pillar. Después entró en los ambientes de las galerías y de los medios de comunicación y movida era ir de fiesta.
XL. ¿Hubo muchos 'delincuentes' en la Movida madrileña?
S.A. Unos cuantos, sí, sí, sí [sonríe]. Pero menos de los que hay ahora en los bancos y en las cajas de ahorros.
XL. ¿Conoció a algún madrileño en ella? 
S.A. [Ríe]. Pues sí, porque todo dios era de fuera. Déjame pensar. Sí, a Enrique Sierra. Y a nuestra mánager Paz Tejedor. Eran gatos. Pero había pocos. Madrid era, y es, sobre todo un lugar de paso en el que todos se quedan.
XL. ¿Qué echa de menos de aquellos años?, ¿qué añora...? 
S.A. Nada. Nada de nada.
XL. No obstante, ¿qué muebles salvaría del 'incendio'?
S.A. Salvaría esa sensación colectiva. Es que hubo un momento en que, en lugar de pretenciosos, éramos humildes. Sabíamos que teníamos muy poca trayectoria detrás de nosotros. No podíamos optar a ser Londres, ni Nueva York ni París. Pero era como jugar a creérselo por primera vez. Y eso me parece saludable. Ahora hay que jugar a creerse otras cosas. ¡Intentémoslo otra vez!
XL. Toca mojarse: ¿la mejor canción de ese periodo fue...?
S.A. En la década anterior, te diría varias del disco de Serrat Mediterráneo. Pero en esos años, finales de los setenta y primeros ochenta, te diría Tu frialdad, de Triana. Y luego me gustó mucho Frío, de Manolo Tena. Para que veas. Creo que son modelos de canciones muy bien hechas y que dicen algo sincero, de verdad. Y que no son muy de la Movida. ¿Otras de la Movida que tuviesen ese nivel de sinceridad y hechura? Pues no lo sé. Tendría que pensarlo más. Porque a todas les veo un defectito. Las de más fama, sean de Radio Futura o de otros grupos, no me acaban de convencer.
XL. Sexo, drogas y rocknroll. ¿Se mantuvo esa trinidad también en el siglo de oro musical ochentero?
S.A. Todo lo que se probó estuvo bien. Me hubiera gustado convencer a amigos o familiares que se quedaron por el camino para que lograsen reconducirlo. Para que hubieran cortado antes con lo que los estaba arrastraba al vacío. Pero cuando el destino decide por ti, es imposible cambiarlo.
XL. ¿Cómo lo sobrellevó usted?
S.A. Yo probé de todo, como todo el mundo. Pero entonces no me sentí llamado a abandonarme al descontrol. Necesité todo lo contrario, tomar aire, y sentir que por lo menos una parte, la parte de la energía que podía dedicar al trabajo, la controlaba a diario. Si no, se me iba todo de las manos.
XL. ¿Es Juan Perro ladrador? 
S.A. Soy algo ladrador. Morder, muerdo poco. Pero estoy intentando controlar mis ladridos [sonríe].
XL. ¿A quién mordería sin dudarlo? 
S.A. ¡Hombre, hay algunos puntos de estación por ahí a los que aún hincaría el diente! Ya voy para viejo perro verde...
XL. Tiene algo de futuro Radio Futura. ¿Volveremos a verlos sobre un escenario?
S.A. Sí, pero un futuro que no está en nuestras manos, sino en manos de la gente que se ha adueñado de nuestro repertorio y lo hace vivir, de lo cual me siento agradecido.
XL. Pero no volverán a reunirse.
S.A. No. Además, después de la desaparición de Enrique no tendría sentido. Lo que ahora me gustaría a mí conseguir es que una parte del repertorio de Juan Perro pase a ese estatus de estar compartido por la gente. Estoy en ello.
XL. ¿Cuántas veces ha perdido el ritmo de su vida?
S.A. Muchas. Lo he perdido en asuntos de vida privada y de descontrol de los vicios. Así como con las drogas me controlé a tiempo, con la bebida ha habido periodos en los que he tenido más dificultad para medirme. No se puede ir por ahí por la vida rompiéndose la cabeza contra las paredes. Pero, como decían los antiguos, la virtud empieza intentándolo de nuevo. Y aquí estoy, intentándolo de nuevo.
XL. Si escribir en España es llorar, ¿qué es cantar?
S.A. [Sonríe]. Comer fuego. Los cantantes, en España, somos una especie de comefuegos.

TÍTULO:  EN PRIMER PLANO TODO POR SALVAR A MI HIJO,.

Difícilmente hallaremos en el Antiguo Testamento un personaje que haya agradado el corazón de Dios de una manera tan profunda como David.
Los sufrimientos de David
David no era perfecto; él era como tú o como yo. Sin embargo, la Biblia dice que él fue un hombre según el corazón de Dios. El Salmo 132 nos recuerda que David tuvo aflicciones: «Acuérdate, oh Jehová, de David, y de toda su aflicción» (v. 1).
Cuando David tenía quince años de edad, fue ungido rey secretamente por Samuel. Y por haber sido ungido rey en secreto, él sufrió mucho a manos del rey Saúl. David corrió para salvar su vida, de un desierto a otro, de una cueva a otra, por cerca de catorce años.
¿Puedes imaginar cuántas de sus noches fueron noches de insomnio? Él no tenía un lugar de descanso. El desierto nos habla de carencia de reposo. Y sólo unos pocos –cuatrocientas o seiscientas personas– le siguieron. Esas fueron las aflicciones de David.
Huyendo de Absalón
David tuvo que huir para salvar su vida de la persecución de Saúl; pero nunca pensó que un día tendría que huir también a causa de su hijo Absalón.
Entre todos los hijos de David, probablemente era Absalón quien tocaba lo más íntimo del corazón de David. Cuando Absalón se rebeló contra su padre y buscaba matarlo, David tuvo que huir del trono. La Biblia habla de cómo David cruzó el valle de Cedrón, cómo subió al monte de los Olivos, atravesó la cumbre del monte, y cruzó el río Jordán. Y, en el camino, muchos le despreciaron y algunos le maldecían; sin embargo, David sufrió el vituperio, y cuando uno de sus asistentes quiso matar al que le maldecía, él dijo: «Déjenlo en paz». Esas eran las aflicciones de David.
Y más aún, cuando los sacerdotes que llevaban el arca vinieron a él porque querían seguirle, él les dijo: «Por favor, regresen, no me sigan; sigan la voluntad de Dios. Si yo soy agradable a Dios, entonces volveré. Yo siempre puedo volver hacia el arca; pero el arca nunca me debe seguir; el arca es siempre el centro de todo».
Cuando estuvo bajo algún tipo de disciplina, David tuvo un corazón muy puro. Recordamos las dos veces en que él peregrinó en el desierto, las dos veces en que él huyó por su vida. Estas fueron las aflicciones de David.
Otra clase de aflicción de David
Pero en el Salmo 132:1, se refiere a una aflicción específica de David, a un sufrimiento casi desconocido para nosotros.
Al ver el contexto, encontramos a David ya en el trono, y no sólo eso, Dios ya le había concedido el reposo. Había vencido a sus enemigos, y hallado su descanso. Esta es la mejor época en toda su vida. Él no sólo estaba en Jerusalén y había tomado la fortaleza de Sion, sino que se había sentado en el trono de David. Pero ahora se nos habla acerca de las aflicciones de David, cuando sus sueños habían sido maravillosamente cumplidos.
Hermano, ¿conoces tú este tipo de sufrimiento? Cuando Dios te bendice, y te concede una hermosa familia, maravillosos hijos, una casa preciosa, un trabajo exitoso, y estás siendo muy usado por el Señor, las puertas se abren por todas partes. Has llegado a la cumbre de tu vida cristiana. Es como si estuvieras sentado en el trono, aquello que siempre has soñado. Cuando su sueño estaba realizado, David padeció por muchas y largas noches. Estas muchas noches de insomnio nos hablan de las aflicciones de David.
«Aconteció que cuando ya el rey habitaba en su casa, después que Jehová le había dado reposo de todos sus enemigos en derredor, dijo el rey al profeta Natán: Mira ahora, yo habito en casa de cedro, y el arca de Dios está entre cortinas» (2 Sam. 7:1).
Al comparar este pasaje con el pasaje en el Salmo 132, podemos imaginar que, después de muchas noches sin dormir, David vino al profeta Natán y le dijo: «He aquí, yo habito en casa de cedro, y el arca de Dios está entre cortinas. Si Dios no tiene reposo, yo tampoco lo tendré». Aquí entendemos cómo el corazón de David era uno con el corazón de Dios.
Entonces Natán le dijo: «...haz todo lo que está en tu corazón, porque Jehová está contigo». David no había dicho lo que estaba en su mente; sólo había expresado que no tendría descanso hasta que Dios tuviera su reposo. Sin embargo, a causa de su amor por su Dios, íntimamente David tenía algo en su corazón, y Natán lo sabía muy bien. Natán representa al Espíritu Santo.
Si amas al Señor, si de hecho sufres y no por ti mismo –por ti mismo no hay razón para que sufras, pues ya estás sentado en el trono, disfrutando del reposo–, ¿por qué tendrías que torturarte a ti mismo? Aquí hay alguien que nunca va a disfrutar de su descanso hasta que su Dios también obtenga su descanso. Hay algo en la mente de David: él desea edificar la casa de Dios. Natán lo sabe muy bien y le dice: «Haz todo lo que está en tu corazón, porque Jehová está contigo».
La Casa es la iglesia de Dios
La casa de Dios, traducida al lenguaje del Nuevo Testamento, es la iglesia de Dios. Nuestro Señor Jesucristo dijo: «Sobre esta roca edificaré mi iglesia». Pedro dijo: «Nos acercamos a él como piedras vivas, siendo edificados juntos como una casa espiritual». Y Pablo dijo: «Vosotros sois la casa de Dios, vosotros sois el templo de Dios».
Entonces, si leemos Efesios, allí tenemos un llamamiento. Pablo habla acerca de la esperanza de ese llamamiento. ¿Qué es un llamamiento? Cuando fuimos salvados, un día, respondimos a su llamamiento. Y, después que fuimos salvados, oímos otro llamado del Señor: «Ven y sígueme, y yo te haré pescador de hombres».
Ahora cada uno puede decir: ‘Yo he sido llamado por el Señor’. Pero si leemos Efesios, cuando Pablo habla acerca de la esperanza de su llamamiento, y si leemos también Colosenses, tal llamamiento es único. Al leer esas dos cartas, vemos que somos llamados a ser un Cuerpo, tenemos un llamamiento para ser edificados como la iglesia de Cristo.
Antes del regreso del Señor, esa casa tiene que estar construida, pues él va a presentarse a sí mismo una iglesia gloriosa. Ahora entendemos que tenemos no sólo un llamamiento individual, sino que compartimos el mismo llamamiento. Y este llamamiento es para que seamos un Cuerpo.
Un sueño de juventud de David
De alguna forma, ese deseo de Dios estaba impreso en el corazón de David. Nosotros no sabemos cuándo tuvo David aquella visión; si cuando él era joven, o cuando era un pastor, no lo sabemos. Porque en aquella época, como pastor, él decía: «Jehová es mi pastor, nada me faltará» (Salmo 23:1). Sin embargo, el último versículo de este Salmo, dice: «Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días» – o «para siempre».
Dios puso ese deseo en David, aun cuando éste era muy joven. Pero, cuando David llegó a la cumbre él debería estar satisfecho, pero ¿por qué no podía dormir? Porque el arca de Dios aún estaba en una tienda.
Hermanos, conocer el corazón de Dios es una cosa; satisfacer el corazón de Dios es otra cosa. Por medio de los libros, por medio de las revistas, conoces la voluntad de Dios, sabes que nuestro Señor quiere edificar su iglesia, sabes que antes de su regreso él se va a presentar a sí mismo una iglesia gloriosa. Tienes todo el conocimiento, pero, ¿dónde estás tú? ¿Estás en la casa de cedro, disfrutando de tu reposo? Hermanos, ¿dónde está el arca de Dios hoy?
Si nosotros deseamos ser edificados juntos como la iglesia de Dios, ¿tenemos el corazón de David? Ese es el comienzo de toda verdadera edificación. De otra manera, todo lo que sabes no es más que un sueño. Somos soñadores, y somos hermosos soñadores. Todo está en el futuro, todo es una teoría. Pero si tú moras en el palacio de cedro, eso es muy real; si estás manejando un auto magnífico y miras a tus hijos maravillosos; eso es muy real. Pero, ¿qué sucede con la casa de Dios? ¿Es todavía un sueño, o sabes que Dios está cumpliendo lo que él desea hacer?
¿Cómo podemos nosotros ser edificados juntos? El primer paso es la experiencia de las aflicciones de David. Si nosotros no conocemos nada acerca de ese sufrimiento, somos meros soñadores. Podrás esperar por más de diez años, y nada ocurrirá. Puedes estar muy ocupado, puede haber muchas puertas abiertas para ti y para mí; pero ¿dónde está el arca de Dios? ¿Obtuvo ya lo que él desea?
Aunque estés ocupado trabajando para el Señor, eso no significa que Dios ya haya encontrado su lugar de reposo. Aquí aprendemos una lección de la historia de David. Finalmente, la voluntad de Dios fue cumplida, y el templo de Dios fue edificado. Pero antes, David pasó por una serie de sufrimientos. La operación de la cruz caló profundamente en su vida.
Tú no eres el hombre
«Aconteció aquella noche, que vino palabra de Jehová a Natán, diciendo: Ve, y dí a mi siervo David: Así ha dicho Jehová: ¿Tú me has de edificar casa en que yo more?» (2 Sam. 7:4).
Aquel día Natán dijo a David: «Anda, y haz todo lo que está en tu corazón, porque Jehová está contigo». ‘Ese es tu sueño, intenta realizar tu sueño’. ¿Por qué? ‘Porque el Señor está contigo’. Pero, menos de veinticuatro horas después, hubo una sorpresa para David. Dios se había agradado del corazón de David, pero al seguir leyendo vemos que aquella noche fue la noche más difícil para David. Después de tantas noches sin dormir, hubo para él una noche de mayor aflicción. Dios le dijo: «No serás tú el que la edifique».
En la vida de David, Dios usó dos veces a Natán para hablar con él. Cuando David cometió el pecado de adulterio y de homicidio, durante casi un año él rehusó confesar su pecado. ¿Qué le dijo Natán? «Tú eres ese hombre».
Y luego tenemos esta ocasión. David tenía mucho celo por la casa de Dios. Y aunque el profeta le había dicho: «Anda y haz lo que quieres; tu sueño se cumplirá»; sin embargo, repentinamente, Natán vino con malas noticias: «Tú no eres el hombre».
David tenía millares de planes; él tenía una pasión por Dios; él tenía mucho celo por el Señor; pero nunca esperó que Dios le lanzaría agua fría a sus planes. «Tú no eres el hombre, porque hay mucha sangre en tus manos». Esas son las aflicciones de David. Cuando tienes un corazón para el Señor y no es tu hermano el que te dice: «Tú no eres el hombre»; no es tu esposa quien te dice: «Tú no eres el hombre». ¡Es Dios mismo quien te lo dice!
No somos nosotros los calificados para edificar la iglesia de Dios. ¡Cuántas veces hemos herido a nuestros hermanos y hermanas! A los ojos de Dios, ¡cuánta sangre hay en nuestras manos!
Así que, sólo porque tú conoces alguna teología, porque conoces algunas verdades bíblicas, tú dices: ‘Ahora, yo voy a edificar la iglesia’. Pero cuando intentas edificar la iglesia, a causa de tu temperamento, a causa de tu naturaleza, inconscientemente, tú hieres a tus hermanos, ¿y luego piensas que Dios te va a usar para edificar su iglesia? Si deseas edificar un muro de cinco metros, tienes que trabajar duro. Pero, si hieres a tus hermanos y hermanas, si has derramado tanta sangre, de hecho, consigues destruir tres metros.
Entonces, si deseamos ser edificados juntos, tarde o temprano el Señor tendrá que decirnos: «Tú no eres el hombre».
Alguien preguntó a la señorita Barber, quien ayudó mucho a Watchman Nee: «¿Cuál es el secreto para trabajar para el Señor?». Su respuesta fue: «El secreto para trabajar para el Señor es no trabajar para el Señor». Esas son las aflicciones de David. Si has consagrado todo al Señor, él te dirá: «Tú no eres el hombre, tú no estás calificado». ¿Lo has oído?
Este es el comienzo de la edificación de la casa, y eso es lo que estaba ocurriendo con David. Pero piensa esto: si Dios te dice: «Tú no eres el hombre», ¿cuál será tu reacción? ‘Bien, entonces, voy a amar al mundo. Si no es conmigo, no tengo nada que ver con eso. Desde ahora, no voy más a las reuniones, o me sentaré atrás. Aún voy a sonreír a los hermanos y hermanas, los voy a abrazar; pero permaneceré muy pasivo, porque Dios me ha dicho: Tú no eres el hombre’.
A menudo, Dios no dice esto directamente, sino que lo dice por medio de un hermano o una hermana. Y cuando oyes eso, dices: ‘No contribuiré más, no voy a usar mis talentos; nada va a salir de mí’. Pero, ¿eso es lo que pasó con David? No, hermanos. Cuando Dios nos dice ‘No’, es una prueba para saber dónde estamos.
Algunas veces tenemos una pretensión, como si fuésemos muy espirituales, hasta que un día esta parte de la obra de la cruz sobreviene. Es la parte más difícil de aceptar, cuando tienes toda la energía, y te lanzan un balde de agua fría. Y eso viene de Dios mismo.
La edificación de la propia casa
¿Por qué Dios dijo: ‘No eres tú el hombre’? Para entender esto, tendrás que leer toda la Biblia. Tienes un corazón, pero no tienes la calificación. Tarde o temprano, descubrirás que no eres capaz. Eso es parte de la obra de la cruz. Tienes que ser ejercitado en la paciencia y escuchar lo que Dios tiene que decirte. «Asimismo, Jehová te hace saber que él te hará casa. Y cuando tus días sean cumplidos, y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino. Él edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre el trono de su reino. Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo» (2 S. 7:11-14).
¿Por qué no eres tú el hombre? Antes que tú desees establecer casa para Dios, tienes que permitir que Dios mismo establezca tu propia casa. En tu corazón, tú piensas en la casa de Dios; en el corazón de Dios, él piensa en tu casa.
Es preciso que tu casa sea establecida, para que entonces la casa de Dios sea establecida. Antes que trabajes para Dios, tienes que permitir que Dios trabaje en ti. Contigo no es posible, no estás calificado. Pero, ¿cuándo estarás calificado? Sólo cuando tu casa esté establecida. Entonces, Dios va a establecer la casa de David. David tiene muchos hijos, uno de sus hijos será escogido, y este es Salomón.
Aquella noche, Dios prometió a David que iba a edificar su casa, y que uno de sus hijos se sentaría en el trono de David, y aquel hijo edificaría la casa de Dios. Eso es muy interesante. Sólo cuando la casa de David fue establecida, entonces Salomón edificó la casa de Dios. Es así como Dios edifica su propia casa.
Nosotros somos exactamente como David – ninguno de nosotros está calificado. Entonces, ¿qué haremos? Permite que Dios trabaje en ti, que Dios trabaje en tu casa. Salomón es parte de la edificación de Dios. Cuando Dios hizo su obra, entonces, por medio de Salomón, fue edificada la casa. Dios no va a usar a David directamente; pero eso no significa que él lo haya rechazado. Por un lado, Dios no te usa; pero, por otro lado, él aún te va a usar; pero te va a usar de una manera indirecta, sólo cuando tu casa esté establecida.
Luego, el camino para la casa de Dios es que Dios tiene que trabajar en nosotros y en nuestras casas. Por esa razón, la vida de familia está íntimamente relacionada con la vida de iglesia. Sin una vida de familia normal, nunca tendremos una vida de iglesia normal. Si no sabes cómo gobernar tu casa, ¿cómo podrás gobernar la iglesia? Esto es muy importante. Por tal razón, David tuvo que permitir que Dios hiciera su obra de una manera muy profunda.
Y sabemos cómo David aprendió la lección, a pesar de que él falló terriblemente. Él estuvo bajo la mano disciplinadora de Dios, pero, por la gracia del Señor, nació Salomón. Cuando Salomón se convirtió en el escogido de Dios, David recordó que él mismo no era capaz de edificar la casa de Dios; él era sólo un pecador preservado por gracia.
El nacimiento de Salomón nos hace recordar la historia del fracaso de David. David era un vaso en las manos de Dios; sin embargo, aquel vaso estaba completamente roto. Por la misericordia del Señor, él hizo un nuevo vaso. Los caminos de Dios son siempre más elevados que nuestros caminos, y finalmente, Salomón estuvo en el trono.
El lugar de la edificación
En 1 Crónicas 21 descubrimos que David pecó una vez más, cuando hizo el censo del pueblo. Él había sido restaurado, y esto, de hecho, puede ser muy peligroso. Después de regresar a Jerusalén, la tentación es ésta: Ahora sabes que Dios está contigo, sabes que él se agrada de tu vida, y entonces la carne, gradualmente, se levanta otra vez, y quieres saber cuál es el poder que hay en tus manos. Así, David pecó contra Dios una vez más.
Dos grandes pecados de David quedaron registrados en la Biblia: uno, cuando el cometió adulterio; otro, cuando hizo el censo del pueblo. Él sabía que había pecado contra Dios. Cuando el ángel casi los mató a todos, entonces él oró.
Dios envió al profeta y pidió que David fuera a la era en el monte Moriah, el lugar donde se separa la paja del grano. Las personas se alimentan con el grano, no con la paja. Cristo es el grano; nuestra carne es como la paja. Cuando estás alimentando a las personas con Cristo, inconscientemente, las estás alimentando también de ti mismo. Por esa razón, David estaba muy orgulloso, y quería censar al pueblo, para saber cómo era su desempeño, para conocer sus logros.
David pecó contra Dios, y por esto tuvo que pasar por la era. La obra de la cruz tuvo que cortar profundamente la vida de David. Entonces pudo ser útil en las manos de Dios. Cuando él pasó por la era y ofreció el holocausto, para su sorpresa, el fuego del cielo se derramó sobre el altar y consumió el sacrificio. Eso significaba que Dios estaba satisfecho, Dios estaba en paz.
Cuando David vio lo sucedido, dijo: ‘Este es el templo de Dios’. ¿Qué significa esto? Antes que el pueblo de Israel entrara en la tierra, Dios dijo a Moisés: «Si entras en la tierra, no sigas las costumbres de los pueblos de la tierra; ellos buscan los lugares altos y hacen sus ofrendas, pero tú no debes hacer eso». Dios escogería un lugar y todo el pueblo de Israel tenía que ir a ese lugar a ofrecer sus sacrificios. En otras palabras, si quieres edificar la casa de Dios, él mismo ya tiene escogido el lugar. Allí es donde debes ir.
Sin embargo, cuatrocientos o quinientos años después que el pueblo entró en la tierra, nadie sabía cuál era el lugar. Nadie lo sabía, ni Salomón, ni David. Todo lo que sabían es que un día habría un lugar escogido por Dios. Pero, gracias a Dios, después de su dolorosa experiencia, sus ojos fueron abiertos. En aquella era, donde la paja y el grano eran separados, estaba el lugar para la casa de Dios. Al mismo tiempo, ese era el lugar exacto donde Abraham ofreció a Isaac.
Por primera vez en la historia, David vio el lugar. Pero Dios tuvo que edificar primeramente a David. Si no hubiese estado establecida la casa de David, David no sabría dónde estaba la base de la casa de Dios. Es una lección que David aprendió en su vejez.
«Y dijo David: Aquí estará la casa de Jehová Dios, y aquí el altar del holocausto para Israel» (1 Crónicas 22:1). Los ojos de David fueron abiertos. En aquel sitio debería ser edificada la casa de Dios. En el lenguaje del Nuevo Testamento, ¿cuál es la base de la vida de la iglesia? Hay dos elementos importantes: uno, alguien como Abraham, que ofreció a su hijo Isaac; y dos, ¿somos nosotros como David, que pasó por la era?
Preparando los materiales
«Después mandó David que se reuniese a los extranjeros que había en la tierra de Israel, y señaló de entre ellos canteros que labrasen piedras para edificar la casa de Dios» (1 Cr. 22:2). Cuando David supo dónde debería echar las bases, él estuvo muy activo. Que Dios le haya dicho: «Tú no eres el hombre que va a edificar», no significa que él no estuviese calificado para preparar los materiales de la construcción.
El que edifica está en primer plano, y el que prepara los materiales está detrás. Salomón recibió toda la gloria, porque de allí en adelante el templo fue conocido como el templo de Salomón, y David estaba atrás de la escena. No importa lo que él haya hecho, las personas no verían su gloria. Dios le dice: ‘No eres tú el que va a edificar’, pero no por eso él se negó a hacer algo. Hablando estrictamente, si nosotros conocemos la historia de esa edificación, el noventa por ciento es el esfuerzo de David, y sólo el diez por ciento pertenece a Salomón. Sin embargo, Salomón recibió toda la gloria.
Hermano, ¿estás dispuesto a proseguir? Si Dios te dice: ‘Tú no eres el hombre que va a edificar’, él no ha dicho que no eres el hombre que puede preparar los materiales. ¿Estás dispuesto a hacer eso? Gracias a Dios, al seguir leyendo el capítulo 22, vemos cómo David hizo aquel maravilloso trabajo.
«Y dijo David: Salomón mi hijo es muchacho y de tierna edad, y la casa que se ha de edificar a Jehová ha de ser magnífica por excelencia, para renombre y honra en todas las tierras; ahora, pues, yo le prepararé lo necesario. Y David antes de su muerte hizo preparativos en gran abundancia ... He aquí, yo con grandes esfuerzos he preparado para la casa de Jehová cien mil talentos de oro, y un millón de talentos de plata, y bronce y hierro sin medida, porque es mucho. Asimismo he preparado madera y piedra, a lo cual tú añadirás (1 Cr. 22:5, 14).
Organizando la Casa
Aquí vemos cuán positiva era la actitud de David. Al seguir leyendo este pasaje, tu corazón va a ser tocado. Aquel a quien Dios dijo ‘No’ – como si hubiese sido rechazado por Dios – todavía prosigue, aunque ya es anciano, no lo abandona todo en manos de su hijo. El no desperdició su tiempo; él hizo mucho esfuerzo en preparar todo para el templo.
Y no sólo eso, cuando avanzamos al capítulo 23, ya está el templo, pero ¿dónde están los levitas y los sacerdotes? David reunió a todos los levitas y sacerdotes, y los distribuyó en veinticuatro grupos. Él era un buen organizador y, en aquella época, Salomón era aún muy joven e inexperto.
En el capítulo 25, David organizó a los músicos y cantores. Él sabía que no podía trabajar en la edificación de la casa; sin embargo, cuando la casa estuviera edificada, tendría que haber sacerdotes, levitas y cantores. Antes de su muerte, David lo organizó todo. Recuerden, en su carne, había una marca que decía: ‘Tú no eres el hombre’. Pero él siguió, y en el capítulo 26, y 27, y especialmente en el 28, él reunió a todos en Jerusalén.
Y delante de todos, David dijo a Salomón: «Sé fuerte y haz la obra». Salomón era el hombre. Ahora sabemos dónde edificar el templo, pero en esa época, David le mostró a Salomón en Jerusalén, el plano de la casa de Dios: «Todas estas cosas, dijo David, me fueron trazadas por la mano de Jehová...» (v. 19).
Piensen esto: el diseño fue trazado por la mano del Señor. Para edificar la casa, se necesita un plano, un dibujo para ver cómo es la casa. Dios le dijo ‘No’ a David; sin embargo, a él le mostró el plano. Y David dijo: ‘Eso fue trazado por la mano de Dios’. La casa de Dios debe ser edificada según el plano. Cuando Salomón edificó el templo, él debía seguir aquel plano. Si David desistiera y dijera: ‘Yo no tengo nada que ver con eso’, ¿quién hubiera sabido cuál era el lugar para edificar la casa?
Esto ocurrió al final de la vida de David. Él no sólo preparó el material, sino también el lugar donde se iban a poner los fundamentos, preparó los planos, organizó a los sacerdotes, puso a los cantores en la casa del Señor. Todo estaba casi listo. Ahora sólo era necesario el toque de oro de Dios. Finalmente, cuando Salomón estuvo en el trono de David, Dios realizó lo que deseaba.
Edificando las familias
Ahora puedes ver cómo la casa de Dios debe ser edificada. La lección es muy clara aquí: Si quieres edificar la casa de Dios, empieza desde tu familia, permite que el Señor obre en ella, enseña a tus hijos no sólo que sean buenos ciudadanos. En este mundo lleno de pecado, hay muchas tentaciones; ser puros es casi imposible. Si quieres ayudar a que tus hijos estén lejos de las drogas, del adulterio, de la fornicación, permite que Dios edifique tu familia, que él establezca tu casa.
Pero no olvides, la razón por la cual tienes muchos hijos es porque uno o dos de ellos serán usados por Dios para cumplir Su voluntad. Por esa razón, como padre, como madre, no tienes que enseñar a tus hijos para ti mismo; tienes que permitir que Dios trabaje en tu familia, y entonces nacerá un Salomón. Y todo ello es por gracia. Un día, él llegará a la cumbre de su vida, no por sí mismo – Dios le habrá escogido para hacer Su obra.
Nosotros sabemos que el Señor vendrá muy pronto. Pero, si él no viene tan pronto – aunque nosotros desearíamos reunirnos con él hoy – ¿cuándo la iglesia será una iglesia gloriosa? No debemos decir: ‘No deberíamos involucrarnos, no conocemos la voluntad de Dios, aún no es el tiempo’. Pero estás listo para preparar los materiales, ¿no es verdad? Puedes preparar el oro, la plata y todo lo demás. Eso significa que estás preparando a tu familia.
Por esa razón, la iglesia tiene que crecer, la iglesia tiene que seguir animando a los jóvenes. Estos son los materiales para la edificación de la iglesia. Cuando ellos estén siendo edificados, se convertirán en las siete columnas de la casa de Dios. «La sabiduría edificó su casa», pero antes de la edificación se necesitan las siete columnas. (Prov. 9:1).
El futuro de la iglesia está en los jóvenes. Por esa razón, si la iglesia está por el Señor, debería preparar oro y plata, y debería recompensar a los jóvenes cuando ellos siguen al Señor, animarlos y darles recompensa. Los jóvenes necesitan ser incentivados. Si el Señor no viene tan pronto, ¿quién sabe si el Señor usará a uno de tus hijos o tus hijas, así como usó a Salomón, para que, finalmente, la voluntad de Dios sea cumplida?
Yo pienso que hoy tenemos un problema. Pensamos: ‘Dios va a cumplir su voluntad, y yo soy indispensable, así que él me tiene que usar a mí’. No, hermanos. Los caminos de Dios son más altos que los nuestros. El problema es el siguiente: ¿Cuántos David hay aquí? Nosotros deberíamos ser como David.
Damos gracias a Dios. Él ya ha hecho una maravillosa obra en Chile. En muchos lugares, el testimonio del Señor ya ha sido establecido. Sin embargo, Dios va a hacer algo más – él va a traer una generación más joven para su iglesia.
Nosotros somos padres. Ahora, como iglesia, necesitamos levantarnos y saber lo que el Señor está haciendo. Los animo a proseguir leyendo toda la historia de David, para que sus corazones sean tocados, pues esa es la historia de la edificación de la casa de Dios, aunque David no recibió la gloria, sino que toda la gloria perteneció a otro. ¿Están ustedes dispuestos?
Que el Señor hable a nuestros corazones.

ELLA & EL CON OLIVER MARTÍNEZ UN HOMBRE CON GANCHO,/ ESTA RATA ES UNA HEROINA,.

TÍTULO: ELLA & EL CON OLIVER MARTÍNEZ UN HOMBRE CON GANCHO:

Un hombre con gancho,.

Olivier Martínez: "El juego de la seducción no me gusta"

El actor francés, al que conocimos noqueando el orgullo de Richard Gere en la película 'Infiel', pasa por España para hablarnos de sus raíces andaluzas, sus inicios en el boxeo y su pasión por la fuerza que transmite el perfume masculino de YSL.
No le gusta que identifiquen su imagen con la de un galán. Es lo primero que deja claro en cuanto se le pregunta por sus papeles en la gran pantalla o su relación con las mujeres. «En la prensa del corazón tengo fama de seductor, pero quiero desmentirlo», dice muy serio. Combativo, directo y con las ideas claras, Olivier Martínez cambia de registro y suaviza la expresión cuando recuerda sus raíces españolas: «Mi personalidad está muy unida con la cultura del sur de España. Mi abuelo era andaluz y mi abuela, de Valencia, pero tuvieron que marcharse muy pronto para buscarse la vida fuera». El actor, que estuvo cinco años con la cantante Kylie Minogue y al que se ha relacionado también con Mira Sorvino, Goya Toledo y Elsa Pataky, pasa ahora por uno de sus mejores momentos junto con Halle Berry, a la que conoció durante el rodaje de Marea letal, en el año 2010. Con 46 años, dos películas por estrenar, una serie en Internet y campanas de boda con la actriz estadounidense, Olivier nos cuenta cómo recuerda su etapa de boxeador y en qué se identifica con L'Homme, el perfume de Yves Saint Laurent.
XLSemanal. ¿Cómo acabó su familia viviendo en Francia?
Olivier Martínez. Yo siempre he creído que mi abuelo, como no sabía ni leer ni escribir, cogió un barco para irse a América, pero se equivocó y acabó en Argelia [se ríe]. Luego se fue a Marruecos para empezar una vida nueva y allí nació mi padre. Después se marcharon a Francia.
XL. ¿Qué ha heredado de su familia andaluza? 
O.M. Mucho. Soy un francés superespañol. Me identifico mucho con ese carácter orgulloso que tenéis aquí y con la forma de ser directa de los españoles, que no os andáis por la ramas. Los franceses van de sutiles y siempre hay que leer entre líneas lo que quieren decir, y a mí eso me cansa.
XL. Incluso estudió usted en la escuela de tauromaquia...
O.M. Fue para el rodaje de Toreros, la película que hice con Maribel Verdú y en la que conocí a Joselito. Fue una gran experiencia porque aprendí a valorar a los matadores, que se juegan la vida. En mi familia, muchos hemos sido boxeadores y tenemos muchas cosas en común.
XL. ¿Cómo recuerda su etapa como púgil entre las doce cuerdas?
O.M. Siempre lo he vivido como algo natural porque mi padre boxeaba, ¡y con los mejores!: Carlos Monzón, Nino Benvenuti... Recuerdo que hubo un momento en el que me planteé que no quería ser el campeón de la calle, sino del cuadrilátero. Fueron muy buenos tiempos, pero hay una persona en mi familia que hizo lo imposible para que yo dejara el boxeo: mi madre [se ríe].
XL. ¿Siguió su consejo entonces?
O.M. Fueron muchas circunstancias. El problema en la carrera de un boxeador es el tiempo y, si lo pierdes, no tienes nada que hacer. Yo paré para hacer el servicio militar y luego tuve un accidente que me dejó fuera de juego mucho tiempo, así que decidí cambiar de vida y dedicarme a hacer teatro.
XL. Y su madre, tan contenta, claro...
O.M. Y mi padre también. Estaban encantados. Empecé haciendo teatro clásico porque descubrí que un escenario es como un ring, hay una luz especial que te envuelve mientras el público está en la oscuridad. Y encima nadie te pega... [se ríe]. Me pareció superfácil.
XL. Pronto lo veremos en la película Marea letal, en la que trabaja con tiburones. ¿Eso también ha sido fácil?
O.M. No tanto, pero fue muy interesante. Cuando trabajas con animales salvajes, no puedes llegar y hacer lo que te da la gana, sino que tienes que adaptarte a la situación; y a mí eso es algo que me encanta. 
XL. También llegará en breve la adaptación del superventas El médico, de Noah Gordon.
O.M. Creo que se estrenará en 2013, pero todavía no hay fecha concreta. Rodamos en Marruecos y mi personaje es el sah de Persia. Estoy muy contento porque he podido trabajar con actores como Ben Kingsley o Stellan Skarsgard. 
XL. ¿Y qué tal su experiencia en Internet con una serie web?
O.M. Muy bien. Cybergeddon es del productor de C.S.I., Anthony E. Zuiker, y me ha servido para conectar con un nuevo público. Al final, el trabajo como actor es el mismo; solo cambia el modo de difusión.
XL. ¿A usted le gusta el formato? 
O.M. Yo soy un poco prehistórico y para mí el cine es una gran pantalla. Sin embargo, los jóvenes ya tienen otro concepto cultural y todo les llega a través de pequeñas pantallas, con vídeos que duran muy poco tiempo.
XL. Otra de sus facetas es la publicidad, donde lo vemos como imagen del perfume LHomme, de YSL. ¿En qué se identifica con la marca?
O.M. Me gusta YSL porque es una firma muy exclusiva, pero también tiene algo de rebelde, de rock and roll.
 XL. Según dicen en la firma, este perfume «es la representación de todas las facetas de la masculinidad». ¿Eso no es mucha responsabilidad?
O.M. Es verdad, creo que he sido un poco inconsciente al firmar esto [se ríe]. En realidad, solo es una forma comercial de explicarlo. Yo no represento nada ni me veo como líder de nadie. Lo único que he reivindicado siempre es la libertad y la sensibilidad, pero de forma individual.
XL. También le otorgan la cualidad de seductor...
O.M. No, yo creo que eso es para Vincent Cassel, que es la imagen de otro de los perfumes de la casa. Puedo ser seductor, pero de forma natural, no me gusta jugar. En la prensa del corazón tengo fama de galán, de guapo, pero para nada soy así.
XL. ¿Por qué le molestan tanto esos calificativos?
O.M. Porque es al revés, yo soy muy directo. El juego de la seducción no me gusta. No soy de los que dan muchas vueltas para conseguir algo. Soy mucho más predecible, más sencillo de manejar. Por eso insisto en que me gustan más los españoles que los franceses, porque son más directos.
XL. Pues tendrá que venirse a vivir aquí definitivamente.
O.M. Ya he vivido en España en tres ocasiones. Hay una parte de mí que encaja muy bien con esta cultura, que es todo lo contrario de Los Ángeles o Francia. Soy francés, pero me caen mal los franceses, y los parisinos son los peores. Prefiero España.
XL. ¿Y ha barajado nuestro país para su boda con Halle Berry?
O.M. Todavía no está entre mis planes, pero voy a pensarlo...

TÍTULO:  ESTA RATA ES UNA HEROINA,.

 Antes de guardar a Rasoul en su jaula, después de una jornada de trabajo en el laboratorio, Peter deja que esta rata gigante (una Cricetomys ...)
 iene un olfato tan privilegiado que es capaz de detectar no solo si un paciente humano padece tuberculosis, sino también dónde se encuentran enterradas las mortíferas minas antipersonas. Como ella, más de trescientas compañeras están siendo entrenadas en Tanzania para cumplir su misión. Descubrimos cómo la idea de un ingeniero y monje budista belga ha dado la vuelta al mundo.

Antes de guardar a Rasoul en su jaula, después de una jornada de trabajo en el laboratorio, Peter deja que esta rata gigante (una Cricetomys gambianus) corretee entre sus brazos. «A ellas les encanta este juego», dice sin dejar de moverse para mayor divertimento del animal.
Peter Luanda es supervisor de entrenamiento de roedores en Apopo, una organización no gubernamental nacida en Bélgica cuyo centro de operaciones está en el campus de la Universidad de Agricultura de Sokoine, en Morogoro (Tanzania). Rasoul es solo una de las varias decenas de ratas que han completado su formación para la detección de la bacteria de la tuberculosis en muestras de saliva, gracias a su refinado olfato. Según un estudio publicado en la revista Tanzania Journal of Health Research, en 2010 las ratas de Apopo examinaron muestras de saliva de más de 12.000 pacientes. Los esputos ya habían pasado por el microscopio, pero estos pequeños gigantes detectaron 716 nuevos casos que el laboratorio había dejado escapar. Estos roedores incrementaron el número de casos diagnosticados en más de un 40 por ciento.
La detección de la tuberculosis, con todo, es solo la mitad de lo que hacen. La rata gigante de Gambia -así se conoce también a esta especie, aunque en Apopo prefieren llamarla hero rat ('rata héroe'), a secas- tiene otra manera de salvar vidas: detectando minas antipersonas. En el vecino Mozambique, plagado de minas desde la guerra civil que asoló el país entre 1977 y 1992, han limpiado ya más de dos millones de metros cuadrados de terreno. Y siguen trabajando para devolver a la población una tierra que, ante la amenaza de la explosión letal, ha permanecido inutilizada durante lustros. Pronto empezarán a trabajar también en Angola, hasta donde ya se ha desplazado un primer comando de estas pequeñas heroínas.
¿Cómo detectan las minas? Una vez más: gracias a su privilegiado olfato, casi igual de hipersensible que el de los perros, utilizados también con éxito en estas tareas. Pero estas ratas, por ser una especie autóctona del África subsahariana, cuentan a su vez con otras ventajas. Su organismo está protegido de las enfermedades tropicales que afectan a las personas o animales que llegan de otras latitudes. Y no solo en África; también en Tailandia han demostrado su eficacia en la detección de minas. Por otro lado, pese a ser una especie especialmente grande comparada con otros roedores -mide hasta 90 centímetros-, no suele pesar más de los cinco kilos necesarios para activar una mina antipersona.
Otra ventaja: a diferencia de los perros, no desarrollan un vínculo emocional con su entrenador. Juegan a gusto con Peter o con cualquier instructor y, al detectar lo que buscan, corren hasta quien trabaja con ellas para cobrar su recompensa (un trozo de plátano, un cacahuete o cualquier golosina), pero no porque hayan desarrollado emociones de empatía con su instructor, sino por pura supervivencia. A las cuatro semanas de vida, estas ratas son separadas de sus madres para iniciar un proceso de aclimatación a la presencia humana. Agotada esta fase inicial, cada rata se especializa en detección de la tuberculosis o de TNT.
En ambos casos, el proceso de entrenamiento es similar. El roedor aprende a indicar al entrenador que ha olfateado lo que buscan. En tierra, lo hace arañando la superficie con sus pequeñas patas; en el laboratorio, basta con detenerse durante cinco segundos ante la muestra contaminada. Cuando lo hace, su instructor activa un mecanismo que suena: un clic y la rata corre hasta él a por su trozo de comida.
Actualmente, apopo cuenta con unos 300 ejemplares en distintas fases de entrenamiento. Las últimas ratas en llegar han sido dos pequeñas gemelas, hijas de Obama y Shana, a su vez descendientes de los primeros ejemplares capturados cuando el proyecto se puso en marcha en 2000. No hubo que buscar muy lejos: armados con jaulas especiales para cazar al animal con vida, los técnicos de Apopo recorrieron los alrededores de Morogoro -la ciudad en que se encuentra el campus- y las faldas de los montes Uluguru. Todo fue idea de Bart Weetjens, un ingeniero y monje budista belga, amante de los roedores desde que le regalaron un hámster a los 9 años. Un día, estudiando el problema de las minas antipersonas en África, vio que casi todos los métodos eran demasiado caros y exigían un alto desarrollo tecnológico. «Las ratas pueden hacerlo», pensó. Y comenzó sus pruebas. Pronto vio que su método era viable y más barato: el proceso de entrenamiento de cada rata, incluyendo el salario del personal, ronda los 3000 euros. Su crianza es muy económica, y su esperanza de vida, de 8 años, durante los cuales salvarán vidas. Se calcula que hay 55 millones de minas sin explotar repartidas en más de 80 países. Si estas hero rats se desplazasen hasta estas zonas, reducirían en mucho el riesgo de los habitantes de volar en pedazos. Su eficacia está demostrada.
Una brigada de 'héroes' al servicio del hombre
HALCONES DEPORTIVOS.
Los campos de fútbol de hierba atraen a palomas y otras aves que, al anidar en ellos, los estropean. Para ahuyentarlas se usan halcones. Estas rapaces también 'trabajan' en los aeropuertos alejando las aves que revolotean por las pistas.
DELFINES ANTIMINAS.Capaces de detectar esferas de metal de 7 cm de diámetro a más de 112 m de profundidad, los delfines son los perfectos detectores de minas en el agua. La Marina de EE.UU. cuenta con una 'brigada' de 75 que, cuando hallan una mina, dejan caer a su lado un transmisor, rastreable por los buzos.
CUCARACHAS DE RESCATE. Capaces de alcanzar cualquier recoveco, las cucarachas se usan para localizar víctimas en los seísmos. Armadas con microchips que vigilan sus movimientos, estos permiten recabar datos sobre la presencia de supervivientes en los escombros.
BUITRES 'COLOCADOS'.Tras una fuga de gas natural que en 1937 mató a 300 niños en una escuela de Texas, las suministradoras decidieron añadir etanotiol al gas, un componente de un fuerte olor que alerta de escapes. A los buitres les atrae ese aroma, lo que los ha convertido en hábiles detectores de fugas en zonas industriales.

DESAYUNO DE DOMINGO CON JUAN PÉREZ MERCADER,./ LEYENDA PERSONAL CARA A CARA CON LA MUERTE, TODO LO HICE FUE COMPRAR UN GPS,.

TÍTULO: DESAYUNO DE DOMINGO CON JUAN PÉREZ MERCADER:

Juan Pérez Mercader, director del Centro de Astrobiología (Carretera de Ajalvir, km 4 - Torrejón de Ardoz), explica su profesión y sus aficiones. Este físico de formación dedica gran parte de su tiempo a la ciencia y aplica la física y la ciencia a la descripción matemática de fenómenos naturales. En este centro se investigan, entre otros aspectos, si existe o si ha existido vida en otros planetas.

Autoridad mundial en física. Asesor de la NASA, investigador de Harvard y autor.

Representado en exclusividad por Thinking Heads
Físico y astrobiólogo, la investigación de Juan Pérez Mercader se centra en la física y su interés fundamental está en la aplicación de la física teórica al conocimiento del universo, desde las escalas más grandes a las más pequeñas y el origen de la vida. El diario El Mundo le ha identificado como una de las personas más destacadas de la ciencia y la tecnología en España. 

“En la Luna están guardados muchos secretos acerca de cómo fue la Tierra en sus primeros instantes”,.

Es Profesor de Investigación del CSIC y de 1989 a 2008 fue Consultant de la Theory Division del Los Álamos National Laboratory en EE UU. Desde 2008, es External Faculty del Santa Fe Institute (EE UU) y, desde 2010, trabaja en la Universidad de Harvard donde es Senior Research Fellow. Es, precisamente, en esta última institución donde dirige la Origin of Life Initiative. Este proyecto, en la frontera entre biología, física, química, computación e ingeniería, tiene como objetivo el diseño y síntesis de sistemas artificiales bio‐inspirados que emulan a los más sencillos seres vivos naturales.

Su Desayuno es el siguiente café con leche con galletas tostadas,.

TÍTULO:  LEYENDA PERSONAL CARA A CARA CON LA MUERTE, TODO LO HICE FUE COMPRAR UN GPS,.

Desde hace algunos años se reciben en mi despacho cartas de lectores de lengua española, de muchos países del mundo, en las que me piden mi texto Cerrar un ciclo. Desde hace algunos años, desde mi despacho se les envía una copia de la columna que en su día publiqué en este espacio, con el título El ciclo de la alegría.

Una mañana, al abrir mi cajón de correspondencia, vi que pedían el texto Las etapas de Paulo Coelho. Como nunca había escrito nada semejante, busqué en internet y descubrí que se trataba de un título diferente para el mencionado Cerrar un ciclo. Descubrí también que durante muchos años habíamos estado enviando a los lectores la columna equivocada y que en realidad querían el texto que transcribo a continuación.

No fui yo, desgraciadamente, quien escribió el original, pero decidí adaptarlo y ahora puedo por lo menos reivindicar parte de su autoría:

Hay que saber cuándo una etapa llega a su fin.

Cuando insistimos en alargarla más de lo necesario, perdemos la alegría y el sentido de las otras etapas que tenemos que vivir. Poner fin a un ciclo, cerrar puertas, concluir capítulos…, no importa el nombre que le demos, lo importante es dejar en el pasado los momentos de la vida que ya terminaron. ¿Me han despedido del trabajo? ¿Ha terminado una relación? ¿Me he ido de casa de mis padres? ¿Me he ido a vivir a otro país? Esa amistad que tanto tiempo cultivé, ¿ha desaparecido?

Puedes pasar mucho tiempo preguntándote por qué ha sucedido algo así. Puedes decirte a ti mismo que no darás un paso más hasta entender por qué motivo esas cosas que eran tan importantes en tu vida se convirtieron de repente en polvo. Pero una actitud así supondrá un desgaste inmenso para todos: tu país, tu cónyuge, tus amigos, tus hijos, tu hermano; todos ellos estarán cerrando ciclos, pasando página, mirando hacia delante, y todos sufrirán al verte paralizado. Nadie puede estar al mismo tiempo en el presente y en el pasado, ni siquiera al intentar entender lo sucedido. El pasado no volverá: no podemos ser eternamente niños, adolescentes tardíos, hijos con sentimientos de culpa o de rencor hacia sus padres, amantes que reviven día y noche su relación con una persona que se fue para no volver. Todo pasa, y lo mejor que podemos hacer es no volver a ello.

Por eso es tan importante (¡por muy doloroso que sea!) destruir recuerdos, cambiar de casa, donar cosas a los orfanatos, vender o dar nuestros libros. Todo en este mundo visible es una manifestación del mundo invisible, de lo que sucede en nuestro corazón. Deshacerse de ciertos recuerdos significa también dejar libre un espacio para que otras cosas ocupen su lugar. Dejar para siempre. Soltar. Desprenderse. Nadie en esta vida juega con cartas marcadas. Por ello, unas veces ganamos y otras, perdemos. No esperes que te devuelvan lo que has dado, no esperes que reconozcan tu esfuerzo, que descubran tu genio, que entiendan tu amor. Deja de encender tu televisión emocional y ver siempre el mismo programa, en el que se muestra cómo has sufrido con determinada pérdida: eso no hace sino envenenarte.

Nada hay más peligroso que las rupturas amorosas que no aceptamos, las promesas de empleo que no tienen fecha de inicio, las decisiones siempre pospuestas en espera del ‘momento ideal’. Antes de comenzar un nuevo capítulo hay que terminar el anterior: repítete a ti mismo que lo pasado no volverá jamás. Recuerda que hubo una época en que podías vivir sin aquello, sin aquella persona, que no hay nada insustituible, que un hábito no es una necesidad. Puede parecer obvio, puede que sea difícil, pero es muy importante. Cerrar ciclos. No por orgullo, ni por incapacidad, ni por soberbia, sino porque, sencillamente, aquello ya no encaja en tu vida.

Cierra la puerta, cambia el disco, limpia la casa, sacude el polvo. Deja de ser quien eras, y transfórmate en el que eres.

EL MISTERIO AMORIM,./ Prueba | Seat León El Rey León Al Golf le ha salido un primo respondón

TÍTULO: EL MISTERIO AMORIM,.

Autor, millonario, amante… ¿impostor?
En “El amante uruguayo” (Alcalá), el Premio Alfaguara Santiago Roncagliolo intenta discernir entre la vida y la leyenda de Enrique Amorim, un millonario que, en cuanto amante de Lorca, supuestamente llegó a estar en posesión de sus restos mortales. texto FERRAN CALDÉS
Finales de 1953. Ciudad de Salto, Uruguay. Cientos de personas se reúnen ante una lápida de tres por dos metros para homenajear a Federico García Lorca, asesinado diecisiete años antes. Preside el homenaje un hombre demacrado que, al final del acto, entierra una caja al tiempo que afirma: “Aquí, en un modesto pliegue de suelo que me tendrá preso para siempre, está Federico…”. El contenido de la caja sigue siendo todavía hoy desconocido, y no tardamos en saber que el hombre que la enterró es el escritor uruguayo Enrique Amorim, cuya biografía y relación con los intelectuales de su época, incluyendo por supuesto a Lorca, protagonizan el último libro del peruano Santiago Roncagliolo. Si bien la figura de Enrique Amorim está llena de claroscuros, tras la lectura del libro y de todo lo que se relata en él lo único que puede darse por seguro es que mantuvo con Lorca una relación más que fraternal.
El centro de atención
Federico García Lorca llegó a Buenos Aires en 1933 para asistir al reestreno de una de sus Bodas de sangre. El éxito de las representaciones fue tal que el escritor español se convirtió en toda una personalidad en Argentina. De ahí, Lorca cruzó el Río de la Plata para ir a Montevideo con el objetivo de finalizar el tercer acto de otra obra, Yerma. Y, aunque su estancia en Uruguay ha sido considerada anecdótica por muchos de sus biógrafos, fue ahí donde entabló amistad con Enrique Amorim.
Pero, ¿quién era Enrique Amorim? Cuenta Roncagliolo que nació en 1900 en Salto y que ya de pequeño mostraba las dos características que marcarían su personalidad: su pasión por la escritura y la necesidad de ser el centro de atención. Fue en el Colegio Internacional Los Olivos de Buenos Aires donde pudo desarrollar al máximo ambos aspectos, y acabó convirtiéndose en un personaje popular a pesar de que su primera obra no fue bien recibida por la crítica. Pero Amorim supo compensar la falta de éxito en la escritura tejiendo una red de amistades y relaciones con escritores de la época que lo posicionaron como uno de los intelectuales más conocidos de America Latina. Así, en 1922 se convirtió en el anfitrión de Jacinto Benavente –con quien parece que mantuvo algún encuentro sexual–, y fue éste quien recomendó a Lorca que contactara con Amorim a su llegada a Buenos Aires.
Una conversación callejera
Buena parte del libro pivota en torno a la relación de Amorim con García Lorca y sus amistades y enemigos comunes, singularmente Jorge Luis Borges y Pablo Neruda, en un período de preguerra civil en que el autor de La casa de Bernarda Alba ya era considerado antiespañol por buena parte de la derecha del país.
En este tiempo, Enrique Amorim seguía con su particular farsa y se casó con una mujer que conocía sus inclinaciones sexuales mientras nacía en él una obsesión por ser padre, todo con el fin de seguir alimentando el personaje que él mismo había creado. Pero el sentimiento por Lorca era tan fuerte que acabó cruzando el océano para reunirse con él en Madrid en vísperas del estallido de la Guerra Civil. Y allí vivió un episodio que lo perseguiría el resto de su vida. Según su propia descripción, él y Lorca estaban discutiendo sobre política en plena calle cuando el granadino se mostró abiertamente del lado de Azaña. Amorim afirmó toda su vida que alguno de los fascistas que asesinaron a Lorca en agosto de 1936 había escuchado la discusión y que fue a raíz de la misma que se ordenó su detención.
Pero no está del todo claro que esta versión de lo sucedido sea cierta. El propio Roncagliolo expresa sus dudas y plantea la posibilidad de que Amorim alterara los hechos a su antojo para adaptarlos a la realidad que más le convenía, siempre como resultado de su afán por destacar y ser el centro de atención de todas las historias.
Se trataba de una verdadera obsesión que lo llevó incluso a ingresar en el Partido Comunista, y eso que sus nuevos compañeros no mostraron demasiado entusiasmo, seguramente por esa condición de millonario que planteaba serias dudas sobre los verdaderos motivos de su ingreso y apuntaba más bien al oportunismo. Sea como fuere, su pertenencia al Partido Comunista le cosechó la antipatía de las autoridades, que lo consideraron un traidor y un elemento peligroso, al tiempo que lo situó al mismo nivel que intelectuales de la época como Neruda o Pablo Picasso, entre otros.
¿Y tan amigos?
Entramos en la década de los 1950 con la expulsión de Amorim de Argentina, ordenada por Perón, un hecho que pasó casi inadvertido en ese momento y que ni siquiera mereció una protesta por parte del Partido Comunista. El millonario uruguayo se fue a Francia, desde donde siguió financiando al partido y donde alimentó tanto su relación de amistad con Picasso como su enemistad con Neruda. Y con el pintor malagueño vivió otro episodio singularmente legendario: en los albores de la Segunda Guerra Mundial, parece que Amorim estuvo presente en un encuentro entre Picasso y Charles Chaplin… ¡haciéndose pasar por Jean Paul Sartre! Pero tampoco está nada claro. A partir del relato de los testigos, parece ser que sí asistió a la cena, pero no queda claro por qué ni en calidad de qué.
Tras la guerra, Amorim comenzó a trabajar en el monumento a Lorca y regresó a Montevideo para tomar las riendas del proyecto, que culminaría en 1953. El acto se celebró con la presencia de Amorim pero sin Neruda ni Picasso, a quienes el propio Amorim intentó convencer de que asistieran hasta el último momento. Tras regresar a París, donde fue detenido por comunista para acabar expulsado del país, Amorim emprendió el viaje final a Montevideo, donde murió en 1960.
El amante uruguayo
Santiago Roncagliolo
Alcalá
368 págs. 21,90 ¤.
Se ponía punto y final a una vida llena de claroscuros que Santiago Roncagliolo intenta explicar en esta biografía, elaborada a partir del testimonios familiares y de los escritos que dejó Amorim, fuentes que a pesar de todo no consiguen esclarecer la veracidad o no de los misterios y anécdotas que el escritor uruguayo fue sembrando a lo largo de su vida. Lo que está claro es que Amorim tuvo una relación con Lorca y que fue el impulsor del primer monumento al escritor granadino.
¿Podría ser que la caja que enterró Amorim detrás de la lápida contuviera los huesos del escritor granadino? ¿Realmente asistió Amorim a la cena con Picasso y Chaplin? ¿Tuvo la parte de culpa que él mismo se otorgó en la detención de Lorca? ¿Mantuvo correspondencia íntima con tantos y tantos intelectuales de su época? Y si los conocía y tenía buena relación con ellos, ¿por qué ni Neruda ni Picasso quisieron asistir al homenaje lorquiano de Salto? Sin dar respuesta directa a todas estas preguntas, Roncagliolo cumple al presentar ante el lector todos los elementos de análisis disponibles para que cada uno saque sus propias conclusiones.
¿Contenía la caja que enterró Amorim los huesos de Lorca?,.

TÍTULO: Prueba | Seat León

El Rey León:

Al Golf le ha salido un primo respondón:

Sonaba la 'Creedence Clearwater Revival' en el equipo de audio mientras conducía por una divertida carretera, a buen ritmo pero sin exageraciones. Y de repente, me sorprendí a mí mismo con una sonrisa dibujada en mi rostro. "¡Qué bien va este coche!", pensé, para sentirme satisfecho a continuación porque, además, había sido fabricado en España...
Sí, el nuevo Seat León se produce bajo la tutela y con la tecnología del Grupo Volkswagen, pero se produce en Martorell, en una planta en este país del que parecen empeñados en hacernos creer que no puede salir nada bueno. Pues se equivocan. La tercera generación del compacto español es un grandísimo automóvil, tanto que es capaz de sacarle los colores a su primo, esa leyenda llamada Golf. Ahora sí que sí...
Para empezar, su diseño está mucho más logrado. Es algo más recogido de dimensiones, pero sobre todo sus líneas maestras resultan menos radicales, menos agresivas. No renuncia en absoluto a matices deportivos en esa carrocería de cinco puertas (vendrán más, como la de tres o la familiar), lo que ocurre es que el dinamismo se combina con una mayor elegancia y prestancia, muy en consonancia con los últimos aciertos de Seat.
La tendencia de mejora se aprecia igualmente en el interior. Pese a ser más pequeño no resulta menos capaz (gana en batalla), aunque lo que más sorprende al cruzar el umbral de las puertas es el ambiente de calidad general que se respira en este León. Los materiales utilizados son agradables y de buen tacto, además de estar ensamblados con el esmero que llega desde Alemania. Y en cuanto al equipamiento, la versión superior Style que utilizamos para nuestra prueba disponía de una dotación sorprendente. Los compactos, modelos en torno a los 20.000 euros como éste, tienen hoy detalles que hasta hace muy poco eran exclusivos de cochazos.
Pero no acaba aquí la cosa, todavía hay más y mejor. Porque si en parado el León ya nos lleva a la admiración, en marcha el nuevo chasis, la puesta a punto de las suspensiones y el tacto de la dirección no invitarán a más y más exclamaciones de satisfacción. Pisa con garbo, sin extraños y sigue con fidelidad las indicaciones del conductor, aunque huyendo también de extremismos que comprometan el confort o la facilidad de manejo.
En cuanto al motor, el turbo de inyección directa de gasolina y 1,4 litros cumple sobradamente en cuanto a prestaciones, lo que no signifi ca que comprometa en absoluto los consumos.

Lo mejor

El comportamiento dinámico es intachable. El chasis tiene un aplomo sensacional y las suspensiones están bien puestas a punto para ir rápido y seguro.

Lo peor

Un detalle poco importante pero que 'chirría' en un coche de su calidad y equipamiento: los cinturones de seguridad carecen de regulación en altura.

Conclusiones

- La nueva imagen del León seguro que agradará a la mayoría. Sigue siendo deportiva pero también mucho más elegante. - La calidad general del producto es la propia del Grupo Volkswagen, toda una garantía que posiciona al coche a un alto nivel. - El motor gasolina 1.4 TSI turbo y de inyección directa es una opción muy interesante. Sus prestaciones son suficientes para un uso convencional y, siendo cuidadosos con el acelerador, gasta poco. - Dinámicamente el nuevo León vuelve a ser una referencia de su segmento, superando incluso a su predecesor, que ya brillaba en este apartado. Permite ir rápido con facilidad, seguridad y confort.