viernes, 11 de mayo de 2012

EL PLAN DE AJUSTE ELEVA LA DEUDA CON LOS BANCOS A 60 MILLONES DE EUROS.

TÍTULO: EL PLAN DE AJUSTE ELEVA LA DEUDA CON LOS BANCOS A 60 MILLONES DE EUROS.

La junta de Gobierno Local aprueba un nuevo crédito por importe de 24,757 millones de euros para pagar a los proveedores.

Más de 1.000 euros por cada emeritense. El mecanismo de pago a proveedores, que obliga a elaborar un Plan de Ajuste para solicitar un nuevo crédito financiero con el que abonar facturas pendientes a empresas y autónomos, sitúa la deuda del Ayuntamiento de Mérida con los bancos y cajas por encima de 60 millones de euros.
Como estaba previsto, la Junta de Gobierno Local aprobó ayer esta nueva operación de endeudamiento. El importe ascenderá a 24,757 millones de euros. El plazo de devolución será de diez años con dos de carencia (en los dos primeros ejercicios solo se pagarán intereses) y el tipo de interés, aún por fijar, será como máximo del 5,5% anual.
El Instituto de Crédito Oficial (ICO) comunicará la entidad financiera con la que se suscribirá el préstamo. Del 16 al 25 de mayo se firmará la póliza, y a partir del día 31 los proveedores empezarán a recibir en sus cuentas corrientes el pago de las facturas pendientes. Con una excepción: si sufren embargos o están en concurso de acreedores las cantidades se enviarán a las entidades embargantes.
La nueva operación estará unos 3 millones de euros por debajo de lo previsto inicialmente, lo que permitirá ahorrar 1 millón de euros en intereses. El mecanismo de pago a proveedores se inició con la comunicación por parte del Consistorio de las facturas pendientes de pago a 1 de enero de 2012. La primera relación ofreció un montante de 27,8 millones de euros. A continuación se elaboró un Plan de Ajuste que incluyera la devolución de un crédito por ese importe, con el que se pagaría la deuda. La aprobación de este plan, como ha ocurrido en el caso de Mérida, da luz verde a la operación de endeudamiento.
Tras esto, los proveedores tuvieron que mostrar su intención de acogerse al proceso. La cifra se rebajó tanto por los no adheridos (que suman 936.126 euros) como por deudas que no debían incluirse al tratarse de entidades públicas, como la Diputación y la Confederación del Guadiana. También han quedado fuera facturas que incluían los intereses de demora. Pero hubo que sumar pagos pendientes que no habían aparecido porque aún no habían sido reconocidos por el Consistorio. Por último, se abrió un periodo de subsanación de errores.
Este plazo terminó el martes. El Ministerio de Hacienda comunicó el miércoles la cifra definitiva de la operación de crédito, que en el caso de Mérida asciende a 24.757.470,44, según apuntó ayer el alcalde emeritense, Pedro Acedo.
Deuda bancaria
Con estos números, es lógico que Acedo apuntara ayer que tenía una «sensación agridulce». Por un lado, gracias a este proceso los proveedores podrán cobrar sus facturas. Pero, por otro, con esta operación aumenta el endeudamiento municipal.
En realidad, este mecanismo no hace más que cambiar la deuda de sitio. En vez de a proveedores, se deberá el dinero a los bancos. El problema es que en este caso habrá que pagar intereses (aunque también es cierto que de no pagar a los proveedores habría que asumir los intereses de demora). Y, sobre todo, que llueve sobre mojado. El crédito de 24,757 millones obligará a pagar 113.000 euros al mes los dos primeros años y 320.000 por mensualidad durante los ocho ejercicios siguientes. Pero ya se soporta una deuda con entidades financieras de unos 35 millones de euros (39,8, según el último dato oficial del pasado 31 de diciembre), que, según apuntó el primer edil, exige el pago de 1.360.000 euros al mes.
Además, Acedo recordó que aún habrá que hacer frente a la deuda con proveedores que ha quedado fuera del proceso, como los 936.126 euros que han quedado fuera del mecanismo y los pagos pendientes con la Diputación Provincial y la Confederación del Guadiana. Por ese motivo, insistió en que es primordial «tomar las medidas necesarias para corregir este desbarajuste». Como apuntó, la situación obligará a renunciar a inversiones y subvenciones y a seguir apretándose el cinturón. «La solución pasa por reducir el gasto de personal», añadió. «Si no, esto será inviable».
Cifras en euros

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